La decisión de Educación de adelantar todo un mes las próximas oposiciones docentes de Secundaria, para que arranquen el 1 de junio y no el 26 como viene siendo habitual, ha provocado el rechazo mayoritario de los sindicatos porque sostienen que el profesorado está en plena fase de cierre del curso "y con mucha faena pendiente".

La formación mayoritaria, STEPV, decidió ayer levantarse de la mesa de negociación como medida de presión y ha convocado para el próximo día 9 de febrero una manifestación en Valencia.

"La conselleria no ha contestado satisfactoriamente a nuestras peticiones y queda por contestar el derecho a poder reclamar las pruebas o las condiciones de los tribunales", señalan.

Los responsables de Educación ya han rechazado la petición del sindicato para rebajar a 50 los aspirantes por tribunal, "que según la conselleria no se puede garantizar", apuntan desde el STEPV, o que se pueda comenzar la prueba con la programación didáctica, extremo tampoco admitido hoy por hoy.

Estos representantes del profesorado exigen una respuesta afirmativa a sus reclamaciones, de ahí la movilización convocada.

"El sindicato no puede participar en una negociación tan importante sin un mínimo de garantías para los miles de personas que participan en estas oposiciones con tanta relevancia para su futuro -señalan en un comunicado-.

Con la protesta convocada reclaman medidas para consolidar y estabilizar al profesorado interino, además de un cambio en el modelo para acceder a un puesto fijo e la enseñanza. STEPV exige un acceso diferenciado para los interinos por un baremo de méritos.

Qué pide FETE-UGT

Por su parte, los delegados de Fete-Ugt quieren, a su vez, "un procedimiento selectivo justo y con garantías que permita convertir el trabajo docente interino y en precario en trabajo docente con estabilidad y derechos".

Han pedido también que se retrase la fecha de inicio de las pruebas al 29 de junio, que se amplíe el número de tribunales en la medida necesaria para que exista una ratio no superior a 50 opositores por tribunal, que haya separación entre las funciones que realicen los tribunales (evaluar y examinar a los opositores) y las que

realicen las comisiones de selección, que queremos que sean también las que realicen la baremación de la fase de

concurso, con el establecimiento de una comisión de selección y baremación por cada 5 tribunales y que no exista el

reparto de plazas por tribunal".

Incluyen asimismo la posibilidad de invertir el orden de las pruebas, como hacen en Catalunya, "y empezar el proceso selectivo por la defensa de la programación y la unidad didáctica y finalizarlo con el examen teórico del tema".