El aeropuerto de Alicante-Elche cerró 2018 rozando los 14 millones de pasajeros al atender a un total de 13.981.320 de pasajeros, alcanzando así un nuevo récord histórico de viajeros tras incrementar su tráfico un 2% respecto al año anterior. Tras la zozobra que provocó el desvío de turistas británicos a Turquía en pleno verano, la temporada baja ha devuelto el protagonismo a la terminal como se demostró el pasado diciembre, con un crecimiento del 11% respecto al mismo mes de 2018. Con los cerca de 830.000 pasajeros en diciembre, el aeropuerto se quedó tan solo a 18.680 viajeros de los 14 millones de usuarios, según la nota hecha pública ayer por Aena.

En 2018 destacó el crecimiento del tráfico nacional, que aumentó un 11,9% con 1.545.138 de viajeros registrados. Asimismo, el tráfico extranjero creció un 0,8% con 12.418.274 de viajeros contabilizados. Todo ello respecto al tráfico en vuelos comerciales.

Desglosando por nacionalidades el tráfico extranjero, los países que más pasajeros aportaron durante 2018 fueron Reino Unido, con 5.598.054 personas, seguido de Alemania, con 915.692; Holanda, con 909.992; Noruega, con 766.466; Bélgica, con 682.947; y Suecia, con 565.904 viajeros.

En cuanto a las operaciones, el aeropuerto de Alicante-Elche gestionó un total de 96.734 vuelos durante 2018, lo que supuso un incremento del 1,5% respecto a 2017. Los vuelos comerciales de carácter nacional aumentaron un 8%, con 16.333 operaciones registradas y los enlaces internacionales crecieron un 0,3% con 80.025 operaciones. Entrando a detallar las operaciones internacionales, los vuelos más numerosos de 2018 fueron los que conectaron con Reino Unido, con 33.923 operaciones; Alemania, con 5.771; Holanda, con 5.696; Noruega, con 4.857; Bélgica, con 4.542; y Suecia, con 3.413 operaciones.

Por otro lado, entre las novedades de vuelos directos desde Alicante respecto a la temporada baja 2017/2018 destaca que se mantienen los enlaces directos con San Petersburgo, Viena y Helsinki que arrancaron en verano, y se programa uno nuevo con la ciudad argelina de Tlecemen (Air Algerie). Otras rutas nuevas son los vuelos directos a Sevilla y Santiago, destino este último hasta ahora operado por Ryanair, y que también ofrece desde la compañía española Vueling.