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La jubilación anticipada de policías deja en precario el control de nuevos negocios

Con el inicio de 2019 la plantilla ha perdido una veintena de agentes, que se han acogido al decreto para dejar la actividad a los 59 años

Dos agentes de la Policía Local de Alicante, durante un servicio reciente por las calles del Casco Antiguo de la ciudad. álex domínguez

Más en precario aún. Así se encuentra la plantilla de la Policía Local de la ciudad de Alicante con el inicio de este 2019 tras la jubilación anticipada de una veintena de agentes que ya se han acogido al real decreto aprobado por el Gobierno central que permite a los policías locales dejar la actividad a los 59 años si acreditan 37 de actividad y un mínimo de 15 años cotizados como miembros del Cuerpo. Además, otros diez agentes ya han comunicado al Ayuntamiento su intención de jubilarse este año cuando cumplan los requisitos y se espera que al menos otra decena se acoja a esta nueva medida, históricamente reclamada por los sindicatos, antes del 31 de enero, la fecha límite.

Estos agentes, según fuentes sindicales, se encontraban en su mayoría destinados a puestos fijos, como la vigilancia de dependencias, o unidades concretas.

Las jubilaciones ya efectivas de una veintena de agentes de una plantilla que ya es encontraba bajo mínimos ha dejado en precario servicios de la Policía Local. Por ejemplo, según subrayan sindicatos policiales, la unidad de aperturas -que se encarga de las inspecciones a locales, cubriendo así la falta de personal en la Concejalía de Urbanismo- se va a quedar con la mitad de los efectivos con los que acabó el año, pasando de diez a solo cinco agentes. En Urbanismo, un solo técnico, que además no dispone de vehículo propio municipal, se encarga de la inspección de nuevos locales, un paso previo necesario para la concesión de la licencia de apertura. Esta falta de funcionarios en Urbanismo se cubría, explican los sindicatos y grupos municipales, con las inspecciones llevadas a cabo por policías. «La unidad de aperturas de la Policía Local contaba con agentes veteranos y con experiencia de más de veinte años», señalaban desde Comisiones Obreras (CC OO) y el Sindicato Profesional de Policías Locales y Bomberos (SPPLB), que alertaba a su vez de efectos negativos en los controles en la calle: «La patrulla que vigila la parte norte tiene que encargarse ahora de más barrios, ampliando el perímetro de vigilancia a otras zonas».

La jubilación anticipada de una veintena de agentes en Alicante coincidiendo con el arranque de 2019, según explicaban ayer los sindicatos, también está afectando a la vigilancia de instalaciones del Ayuntamiento, donde se han quedado «algunos turnos» sin cubrir por la falta de agentes. Entre los puntos, apuntaron a edificios municipales y, también, al Castillo de Santa Bárbara. «El inicio del año ha sido caótico por la falta de agentes y la incapacidad de cuadrar los servicios», destacaban ayer desde CC OO. En la misma línea se mostraron desde el SPPLB, donde hablaban de «incertidumbre» entre los agentes y de «imprevisión» por parte de la Jefatura.

Medidas del gobierno

El concejal de Seguridad, el popular José Ramón González, admitió ayer la difícil situación en la que se ha quedado la plantilla de la Policía Local tras las bajas anticipadas de, por el momento, una veintena de agentes. «Se están intentando cuadrar los servicios lo mejor posible. Vamos a tirar de horas extra mientras no podamos contratar a interinos. Además, la oferta pública de empleo ya anunciada se ampliará con el número de agentes que finalmente comuniquen su decisión de jubilarse, para lo que tienen de límite el próximo 31 de enero. Por ahora, una treintena ya ha pedido la baja, de los que una veintena ya no están trabajando. Esperamos unas cuarenta bajas en total», señaló ayer el edil, quien admite que ninguna solución será a «corto plazo». La más inmediata, que se prevé que esté disponible para dentro de dos meses, será la contratación de agentes interinos.

Tras una reciente decisión de las Cortes Valencianas, a través de una enmienda a los Presupuestos, los ayuntamiento podrán paliar los efectos de las jubilaciones anticipadas con la contratación de interinos, que sin embargo no podrán llevar pistola. Sin embargo, la bolsa de policías interinos de Alicante cuenta ahora con un máximo de cinco agentes, entre ellos los dos que cesaron el pasado 31 de diciembre después de estar trabajando desde la campaña de verano. El Ayuntamiento pretende abrir la bolsa para dotarla de más efectivos. También convocará «cuanto antes» plazas dentro de la oferta pública de empleo, que entre las anunciadas y las que se queden vacantes con las jubilaciones pueden rondar las setenta.

Propuestas

Entre las peticiones sindicales, UGT pide al gobierno municipal que la creación de una bolsa de seis servicios para cubrir eventos especiales en fechas señaladas, como Hogueras, Nochevieja, Santa Faz o Semana Santa. «Estas bolsas son de obligado cumplimiento para los agentes. Pedimos que se convoque una bolsa extraordinaria para estos eventos, que también se amplíe a otros servicios del Ayuntamiento que se encuentran en precario», reclama UGT.

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