Harto estaba José Torrecillas de contemplar cómo la basura se iba acumulando día tras días frente a su casa, junto a una pequeña plaza de la calle Cuarzo, en el barrio de Colonia Requena. Con 77 años y todo el tiempo del mundo libre desde que se jubiló hace 11 años, Torrecillas decidió ponerse manos a la obra y adecentar él mismo la zona en vista de que el Ayuntamiento no actuaba. Un año y medio después la estampa no puede ser más diferente. Este vecino ha retirado las toneladas de basura que cubrían un pequeño jardín junto a la plaza, ha podado las plantas, ha hecho jardineras y ha plantado flores y árboles nuevos.

Reconoce que la tarea no ha sido sencilla. «Había palmeras plantadas que estaban totalmente cubiertas por la basura e, incluso, en medio de la montaña de desperdicios pernoctaba un mendigo». Cuando José Torrecillas empezó a retirar los escombros recuerda «cómo salían ratas y más ratas del tamaño de conejos. Les intentaba dar con un machete que llevaba, pero eran muy rápidas», recuerda entre risas.

Arbolado cuidado

Tras dejar despejada de basura la zona, empezó a ocuparse del arbolado, que se encontraba en pésimas condiciones. Él mismo retiró pequeños árboles que estaban muertos y ha podado las palmeras más pequeñas. «Con las más grandes no puedo, necesitaré ayuda», lamenta. También ha saneado las plantas de menor tamaño de la zona ajardinada, ha plantado nuevas especies y a diario se ocupa de que las malas hierbas no estropeen el jardín. Pero ahí no quedó la cosa. José Torrecillas también construyó jardineras que dan realce a la plaza y una imagen más cuidada. Para ello ha contado con la ayuda de sus vecinos, que están encantados con el cambio de imagen de esta zona del barrio. «Me han ayudado económicamente con lo que han podido. Un día venía un vecino y me daba 5 euros para ladrillos, otro día llegaba otro y me daba 3 para cemento...».

Pero aquí no acaba la incesante actividad de este jubilado, que también se hace cargo de una parcela de la vecina parroquia y en un patio que hay a espaldas de su bloque tiene plantado un verdadero vergel. «¿No ves que estoy jubilado? No tengo otra cosa que hacer salvo comer y dormir. Además, en el caso de la plaza que había frente a mi casa, se lo dijimos mil veces al Ayuntamiento y no hizo nada», sostiene este septuagenario que cada día acude a la faena impecablemente vestido, con pantalones de pinza, camisa y zapatos relucientes. Un guardapolvo azul impide que se manche y una gorra negra le protege del sol.

Lejos de lo que pueda parecer, Torrecillas jamás se dedicó profesionalmente a la jardinería. «Trabajé 48 años de camionero y recorrí 11.962.000 kilómetros», precisa lleno de orgullo.

Más de 50 años lleva Torrecillas viviendo en Colonia Requena, «un barrio de buena gente en el que nunca antes había habido problemas». Sin embargo, este vecino no es ajeno a los conflictos que en los últimos años se han instalado en esta zona de la ciudad, especialmente la ocupación ilegal de viviendas. «En más de una ocasión me he enfrentado a los okupas y en mi bloque no han entrado».

Conscientes de la labor tan importante que está haciendo este vecino por su barrio, desde la asociación de vecinos de la zona quieren impulsar una acción de reconocimiento y «proponer que la plaza ha arreglado José Torrecillas lleve su nombre», señala Antonio Colomina, presidente de la Asociación de Consumidores y Vecinos de Colonia Requena.