El Ayuntamiento de Alicante y los vecinos afectados por el proyecto para construir un aparcamiento para los trenes de carga del Corredor Mediterráneo junto a Casa Mediterráneo han decidido plantear batalla, administrativa y en la calle, sobre las propias vías, para impedir que la iniciativa del Ministerio de Fomento termine en un documento, negro sobre blanco, y estrangule el futuro de la ciudad hacia el sur. El Ayuntamiento remitirá un informe a Adif planteando ubicaciones alternativas, y los vecinos aseguran que «si hay que ponerse los chalecos amarillos, naranjas o encadenarnos a las vías, lo haremos», subraya José María Hernández Mata, portavoz vecinal y de la Plataforma Renfe. La administración local y los vecinos quieren aprovechar que el proyecto está en fase de estudio para pararlo, aunque, en un principio, Adif sostiene que la decisión final se adoptará en función de las necesidades de los operadores ferroviarios.
El Ministerio de Fomento ha incluido en el proyecto para conectar el Puerto de Alicante con el Corredor Mediterráneo la construcción de un apartadero (aparcamiento) para los trenes de mercancías junto a Casa Mediterráneo, en la playa de vías sin uso que mantiene Adif. El proyecto estrangula el desarrollo urbanístico hacia Agua Amarga y la EUIPO, diseñado con carriles-bici y zonas verdes. Pese al revuelo social, en la zona están ahora mismo en proyecto también una macroplanta para el almacenamiento y distribución de combustible, una gasolinera, y ahora el parking para los trenes, lo que consolidaría el carácter industrial de esta zona de la ciudad en la que en los últimos años se han construido miles de viviendas.
Alternativas
La concejala de Urbanismo, María Carmen De España, trasladó ayer el rechazo del equipo de gobierno al aparcamiento para trenes de carga proyectado por el Ministerio de Fomento junto a Casa del Mediterráneo, y anunció que se ultima un proyecto que prevé ubicaciones alternativas para este apeadero, así como soluciones estratégicas para eliminar definitivamente las vías del tren del frente litoral. Algo en lo que coincide el PP, curiosamente, con Compromís, PSOE y Guanyar, contrarios a los planes del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias. «Ni este apeadero ni los macrodepósitos ni cualquier otra iniciativa que suponga condenar el frente litoral tienen cabida en el modelo de ciudad que queremos promover y, por tanto, siempre nos pronunciaremos en contra», aseveró.
Urbanismo ha presentado, por otro lado, alegaciones al proyecto de Adif para conectar el ferrocarril con el aeropuerto mediante la actual línea Alicante-Murcia y la fase I de la variante de Torrellano, «que contribuye a consolidar la presencia del ferrocarril en primera línea de costa en contra de las estrategias territoriales de la Comunidad Valenciana y del modelo de ciudad que quiere promover el equipo de gobierno», aseveró la edil popular.
El Ayuntamiento ha adjuntado a las alegaciones el informe técnico realizado por el Servicio de Estudios y Proyectos y el departamento de Planeamiento de la Concejalía de Urbanismo, en el que se hace constar que la ejecución de esta primera fase de la variante de Torrellano no formaba parte del estudio del proyecto de remodelación de la Red Arterial Ferroviaria de Alicante, aprobado el 26 de septiembre de 2006. «En el que se preveía una estación en la terminal del aeropuerto, asumiendo la ejecución total de la variante sin fases y liberando, por tanto, el ferrocarril por la línea de costa sur de Alicante», recordó De España. Las alegaciones sostienen que nuestro modelo de ciudad «se fundamenta en la integración urbana y la puesta en valor del litoral sur».
Por su parte, los vecinos se muestran indignados porque el aparcamiento de trenes se suma a que Adif siga sin retirar la «vía de la vagoneta» de los terrenos para el futuro parque central de Alicante. «Este aparcamiento es la última fechoría de Adif con Alicante», apuntó Hernández Mata, portavoz de los vecinos. «Haremos todo lo que se tenga que hacer, todo, para impedir la realización de obras de los dos últimos proyectos que mencionamos, y usaremos chalecos amarillos o naranjas o cadenas, porque ya está bien de abusos y desprecios con los vecinos», sentenció Hernández Mata.
