Hoy, seis de diciembre, conmemoramos los 40 años de la ratificación mayoritaria de la aprobación por referéndum por los españoles, en 1978, de nuestra Constitución, aprobada por el Congreso de Diputados en la sesión plenaria celebrada el 31 de octubre de 1978, a la que asistí elegido como Diputado por la provincia de Alicante, que sería sancionada por el Rey el veintisiete de diciembre.

Nuestra Constitución es una Ley de leyes en la que participará la élite intelectual y política, con reconocida experiencia, de la década de los 70.

Fraga Iribarne, López Bravo, Marcelino Camacho, Nicolás Redondo, Tierno Galvañ, Jordi Pujol, Heribert Barrera, Adolfo Suárez, Iñigo Cavero, Dolores Ibarruri, Santiago Carrillo, Xavier Arzallus, etc. y una pléyade de jóvenes que con una gran ilusión iban a escribir en folios en blanco una Constitución para la convivencia de un pueblo.

No se valorará esa ingente labor si se olvidan los antecedentes históricos y legislativos que vivíamos en España.

Quiero recordar, aquí y ahora, la gran labor realizada por la Agrupación Provincial de Abogados Jóvenes, con más de 100 abogados en ejercicio, en la década de los 70.

Propugnábamos la instauración del Estado de Derecho, la Libertad, la restauración de la democracia y participación política. Realizamos actos públicos con políticos comprometidos como Raúl Morodo, Calvo Serer, Ruiz Jiménez y un largo etc.

Realizamos seminarios, mesas redondas, charlas en el Colegio de Aparejadores, en la Mutua Madrileña, en la Cámara Agraria, etc., no siempre exentas de riesgo.

Fueron notarios de nuestra actividad Radio Alicante, con el gran Vicente Hipólito, la Voz de Alicante, el Diario Información con Antonio Dopazos, La Verdad con Marín Guerreo y José Maria Perea o el confidencial de Paco Poveda y tantos otros.

Cierto que compartimos esa dura tarea con Sindicatos, partidos políticos en la clandestinidad, Amigos de la Unesco, etc., pero también se olvida que hubo una oposición organizada como la Junta Democrática y la Plataforma de Convergencia que más tarde formaría La Platajunta.

Se quiere salir sin traumas de esa situación, muerto Franco, y se redacta la Ley de Reforma Política, que tenía que ser aprobada por los Órganos legislativos franquistas. El entonces Consejo Nacional la aprobaría con 80 votos favorables, 6 abstenciones y 13 en contra. Entre ellos el de Blas Piñar y Girón.

Pasa a las Cortes franquistas. El Presidente es Torcuato Fernández Miranda, que popularizará que la reforma se hiciese "de la Ley a la Ley", sin traumas, ni violencia. El resultado, abrumador: 425 votos a favor, 59 en contra y 13 abstenciones. El régimen autoritario había finalizado.

La Platajunta propugnaba el no. Votó el 77 % del censo electoral. A favor el 94%, negativos el 2.5%, en blanco/nulos 3%. Es claro que mayoritariamente el pueblo español opta por una transición pacífica. Todo va a suceder muy rápido.

El 22 de noviembre de 1975 empezó a reinar Juan Carlos I.

En Julio de 1976 el Rey nombra Presidente de Gobierno, tras la forzada dimisión de Arias Navarro, a Adolfo Suárez, que haría escribir a Ricardo de la Cierva "Error que gran error". Forma el famoso Gobierno de "penenes".

Pero en aquel 1976 la Transición iba a pasar una prueba de fuego: Secuestran a Oriol y Urquijo. El GRAPO secuestra al general vinuesa y la Policía mataba a una chica en plena calle. La extrema derecha asesinaba impunemente a unos abogados laboralistas.

Con Antonio García Miralles, vicepresidente de la Agrupación que yo presidía, nos vamos a hablar con el Presidente de la Audiencia, el Magistrado De la Concha para pedirle que la bandera nacional de la Audiencia ondeara a media asta. Lo acepta inmediatamente diciéndonos "en estos momentos los hombres de Derecho tenemos que estar unidos".

Se celebran las primeras elecciones democráticas. PSOE y UCD obtienen 4 diputados cada uno, el PC, uno y se eligen los tres senadores, uno será de UCD.

Se abren las primeras Cortes el 22 de julio de 1977, el Rey disipara la larga discordia de España, en su discurso: "La institución monárquica proclama el reconocimiento sincero de cuantos puntos de vista se simbolizan en estas Cortes. Las diferencias ideológicas aquí presentes no son otra cosa que distintos modos de entender la paz, la justicia, la libertad y la realidad histórica de España. La diversidad que encarnan responde a un mismo ideal: el entendimiento y la comprensión de todos. Y está movido por un solo estímulo: el amor a España".

Hoy celebramos el 40 aniversario de nuestra Constitución. 40 años de libertad, tolerancia, progreso, justicia y paz, en una alternancia en el poder de UCD, PSOE y PP reiterada digna de todo encomio. Hoy es la fiesta de la fraternidad, de la amistad, del amor, del orgullo de sentirnos españoles. Es la fiesta de todos. Larga vida para la Constitución. Feliz día a todos. ¡Viva la Constitución!