La defensa de Miguel López ha pedido la absolución de éste por la muerte a tiros de su suegra, María del Carmen Martínez, viuda del expresidente de la CAM, Vicente Sala. El escrito de defensa ha sido presentado esta mañana en el juzgado de Alicante que investiga el asesinato. "Las acusaciones no dicen en qué pruebas se basan. Y no lo dicen porque no hay pruebas. Y no hay pruebas porque no ha sido Miguel", asevera el letrado Javier Sánchez-Vera en su escrito. La defensa arremete también contra la investigación policial, al considerar que desde el principio se centraron en Miguel López, aunque luego todas las pesquisas que se practicaron fueron demostrando que no había sido él. "La Policía se ha empecinado para no tener que reconocer el fracaso de su investigación inicial", añade. El escrito de defensa era el último que faltaba por presentar en el juzgado. Ahora el magistrado instructor José Luis de la Fuente deberá decidir si abre juicio oral para que la causa sea enjuiciada por un jurado popular en la Audiencia.

La defensa asegura que Miguel López ha pasado los dos peores años de su vida, acusado de un crimen del que es inocente y que le ha llevado a tener una sintomatología ansioso-depresiva "por la propia muerte violenta de María del Carmen y al verse injustamente acusado de ello".

El abogado asegura que el conflicto en la familia Sala por el control del holding empresarial, holding empresarial "no tenía nada que ver con Miguel López". "Esos conflictos que son de la familia y no de los cuñados suceden en muchas empresas y no es motivo para matar a nadie", señala, a lo que añade que ese enfrentamiento "no era tan virulento como se quiere hacer ver y era llevado por unos abogados que negociaban". La defensa achaca el conflicto familiar al primogénito de la familia, Vicente Sala, al señalar que "cada vez quería adoptar más protagonismo en las empresas". Según el relato de la defensa, toda la situación provocó que las tres hijas se distanciasen de su madre, aunque "poca gente ajena a la familia conocía de estas tensiones".

El abogado replica a la acusación particular que María del Carmen Martínez no era un obstáculo para que Miguel López accediera a la fortuna de su mujer, porque "pasase lo que pasase", nunca podría hacerlo, ya que la pareja lleva veinte años casada en régimen de separación de bienes. El escrito de defensa sostiene que Miguel López la tarde del 9 diciembre de 2016 se limitó a entregar las llaves del coche a su suegra cuando fue a recogerlo a Novocar y se fue. El abogado de López reitera que María del Carmen Martínez se quedó en el coche mirando su teléfono y momentos más tarde, sobre las 18.55 horas, recibió los disparos que acabaron con su vida. También incide en que la mujer tenía arrancados los botones de la camisa y desgarrado el jersey, hecho que indicaría que pudo haber un forcejeo.

También se asegura que en Novocar nunca ha tenido cámaras de seguridad, ni en la zona del lavadero, donde ocurrió el crimen, no en ninguna otra parte. En este sentido, insiste en que "el lavadero es un sitio abierto en el que se lavan coches, con algún trasto viejo apoyado en la pared y una manguera" que no necesitaba tener a alguien cuidándolo.