«¡Turista! Visite los socavones de la calle Moncada en la Zona Norte de la ciudad de Alicante». Éste es el explícito mensaje con el que vecinos de Virgen del Remedio han empapelado la plaza del Ayuntamiento, los alrededores de la Plaza de Toros y otros lugares emblemáticos de Alicante alertando de los agujeros que hay desde hace tres años en la calzada de la calle Moncada y que siguen sin reparar. Dos socavones con solera que el Ayuntamiento se ha limitado a cubrir con tablas y a vallarlos para evitar que se cuelen los coches y las caídas de personas que cruzan la calle.

Además de los carteles colocados en distintas zonas de la ciudad, los vecinos han señalizado los dos agujeros, de aproximadamente medio metro de diámetro, como si se una obra de museo se tratase. Han colocado carteles muy visibles en los dos socavones indicando como autor al Ayuntamiento de Alicante, y la fecha de realización: el año 2015.

Es la segunda acción de protesta en un año que realizan los vecinos, que de nuevo la han confiado a Juan Manuel «Nelo» Curti, actor de la compañía Teatro de Esquina, residente en la misma calle Moncada, por lo que conoce de primera mano la problemática.

La primera acción «afterpoética» fue realizada en octubre de 2017, cuando Curti ideó una «performance» en la que escenificaba de forma reivindicativa e irónica el problema que sufre el vecindario por la desidia municipal. En aquella ocasión el actor introdujo en una caja una muestra de los materiales para arreglar los agujeros, las instrucciones para hacerlo y una carta dirigida al alcalde que gobernaba entonces, el socialista Gabriel Echávarri, que él mismo llevó al Ayuntamiento vestido con una bata. Primero pasó por el Servicio de Atención Integral a la Ciudadanía, sin éxito, y después intentó entregarle la caja a Echávarri, aunque tampoco pudo dársela en mano.

En la carta, el actor explicaba que «por la Zona Norte no pasean los turistas, pero a los vecinos nos gustaría poder hacerlo sin acabar viajando al centro de la Tierra. Porque algunos escribimos, pero no somos Julio Verne».

Añadía en la misiva que a la calle Moncada le surgieron curiosos cráteres «y lo único que habéis hecho es poner una absurdas vallas. ¿Todo lo solucionáis con vallas, como en Melilla? Es lo único que cabe preguntarnos ante semejante ejemplo de desidia». Los vecinos de esta calle próxima a la plaza de Orán hablan de marginación por lo mucho que se está demorando el arreglo.

Un año después intentan llamar la atención del equipo de gobierno popular con una nueva acción que han grabado además en un vídeo «consistente en enumerar los socavones e invitar a los turistas a visitarlos. Esperamos que sea suficiente para que se resuelva en problema y que no tengamos que seguir actuando».

Curti propuso a sus compañeros de Teatro de Esquina hacer un guión sobre los socavones porque «cabe un chiquillo y la solución del Ayuntamiento es poner vallas, que cortan el paso. Queremos una solución para que la calle esté en condiciones porque con el peso de los coches puede hundirse más». De hecho, el propio actor se sentó junto al socavón más grande e introdujo las piernas para demostrar que cabe un niño entero.