Una delegación encabezada por el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, participa hoy lunes en la jornada 'Conectando Europa 2021-2027', que se celebra en el Parlamento Europeo, y a la que también asistirá una delegación de Aragón, con su presidente, Javier Lambán, para defender la inclusión del tramo Sagunt-Teruel-Zaragoza del Corredor Cantábrico-Mediterráneo en el plan de redes transeuropeas 2021-2027. Adif está invirtiendo 386,8 millones de euros en el tramo Sagunt-Teruel-Zaragoza, con un horizonte de fin de obras de 2022-2023, y en el que ya se han invertido unos 50 millones de euros. Con estas obras se pretenden mejorar los tiempos y llegar a realizar el recorrido en 3 horas y 35 minutos en 2022 desde València.

Esta decisión se tomará el próximo jueves con la votación de enmiendas presentadas a la aprobación del plan que financiará las redes transeuropeas de transporte en el sexenio 2021-2027, dotado con 30.600 millones de euros. Entre las citadas enmiendas se encuentran las de las eurodiputadas Inmaculada Rodríguez-Piñeiro (de los socialistas valencianos) e Inés Ayala (de los aragoneses), una vez que la primera criba dejase fuera hace unos meses este tramo y solo contemplarse el eje atlántico.

Desde el Gobierno aragonés han defendido que el corredor ferroviario Cantábrico-Mediterráneo es "una infraestructura estatal, prioritaria y estructurante". "Los datos hablan por sí mismos y los aportan los operadores, el Puerto de Valencia, los agentes sociales de las comunidades que atraviesa y, por supuesto, sus presidentes y el propio ministro de Fomento, José Luis Ábalos".

Este lunes tiene lugar la sesión 'Conectando Europa 2021-2027', que abrirán y cerrarán, en este orden, las eurodiputadas Inés Ayala e Inmaculada Rodríguez-Piñeiro, la comisaria de Transportes, Violeta Bulc, y los presidentes de Aragón la Comunidad Valenciana, Javier Lambán y Ximo Puig, respectivamente.

También el Gobierno central asistirá a los encuentros, acompañando a los Ejecutivos autonómicos, con el secretario de Estado de Infraestructuras, Javier Izquierdo, y el comisionado para el Corredor del Mediterráneo, Josep Vicent Boira, quienes presentarán el proyecto por parte del Ministerio de Fomento.

La delegación valenciana está integrada por el presidente Confederación Empresaria, Salvador Navarro; la directora de la Confederación Empresarial, Inmaculada García; el delegado del Consell para UE, Joan Calabuig; el presidente de la Cámara, Vicente Folgado; el presidente de la Autoridad Portuaria de Valencia, Aurelio Martínez; el secretario general de UGT, Ismael Sáez; el secretario general CCOO, León Arturo, y el coordinador adjunto de Infraestructura y relaciones institucionales de Adif, Antonio Vicente Sánchez.

El martes, 20 de noviembre, los presidentes Lambán y Puig agotarán todas las posibilidades de contactos europeos con el encuentro con el presidente del Parlamento Europeo, Antonio Tajani. Allí, darán a conocer argumentos y datos que respalden las demandas.

La apuesta por el Corredor Cantábrico-Mediterráneo constituye un elemento de prosperidad para la Comunitat Valenciana, Aragón, Navarra, La Rioja, País Vasco y Cantabria, territorios que concentran casi 10 millones de habitantes y en torno al 21 por ciento del PIB. El Corredor es la mejor herramienta para canalizar la mercancía absorbida por los puertos de manera fluida, económica y medioambientalmente sostenible, potenciando el desarrollo económico y la logística europea.

Sin embargo, desde el Gobierno aragonés han defendido que, a ojos de todos los sectores implicados, esto es "claramente insuficiente", por lo que reclaman retomar la planificación del gobierno central de 2005 para construir una línea de altas prestaciones, elevando la inversión a 4.000 millones de euros, una cantidad que, "aunque alta, contrasta con los casi 13.000 millones que se reclama para hacer de altas prestaciones al eje Zaragoza-País Vasco".

La Autoridad Portuaria de Valencia asimismo tiene previsto canalizar la financiación en forma de préstamo de un total de 53,6 millones de euros para la mejora de la línea ferroviaria entre Zaragoza, Teruel y Sagunt, según el Programa Plurianual 2017-2021 del Fondo Financiero de Accesibilidad Terrestre Portuaria.

"Todo ello resulta muy necesario ante la falta de homogeneidad en cuanto a sus características con el resto del corredor, lo que obliga a algunas de las empresas ferroviarias a optar por vías alternativas (Tarragona o Madrid)", han reivindicado desde el Ejecutivo autonómico, para añadir que, actualmente, una parte importante de los tráficos ferroviarios en el corredor está empleando itinerarios alternativos que suponen incrementos de la distancia de transporte y corren peligro de dejar de ser competitivos frente al modo carretera.

Además, suponen consumos adicionales de combustible y, por tanto, emisiones de contaminantes que redundan en la ineficiencia desde el punto de vista medioambiental de los recorridos por los itinerarios alternativos. De acuerdo a los análisis realizados, el itinerario vía Tarragona supone en el entorno de 150 kilómetros más que por la línea de Teruel, lo que representa un 40% incremento en la unión entre el área de Zaragoza y el de València-Sagunt.