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Los nuevos crematorios deberán estar a más de 200 metros de las viviendas

Sanidad da prioridad a la normativa local, que en el caso de Alicante amplía la distancia a 500 metros

Los crematorios deberán estar ubicados a más de 200 metros de las viviendas. RAFA ARJONES

Los nuevos crematorios que se instalen en la Comunidad Valenciana deberán estar a más de 200 metros de viviendas o espacios vulnerables, como pueden ser un parque infantil, un colegio o una instalación deportiva. Preferiblemente, estas instalaciones deberán estar también en suelo industrial. Estas son las principales novedades de la orden que está elaborando la Conselleria de Sanidad para revisar y actualizar los requisitos sanitarios para la ubicación y funcionamiento de los hornos crematorios. Un texto que ayer salió a información pública para que se presenten alegaciones.

Es la primera vez que Sanidad establece para este tipo de instalaciones una distancia mínima respecto a las zonas residenciales, algo que hasta ahora se dejaba en manos de los ayuntamientos. Algunas localidades tienen en este sentido normativas más restrictivas que la que prepara Sanidad. Es el caso de la ciudad de Alicante, donde según recuerda el edil de Guanyar, Miguel Ángel Pavón, se cambió el PGOU para que estas instalaciones estuvieran a un radio de 500 metros de las viviendas en suelos industriales, cementerios o suelos no urbanos. En este sentido, desde Guanyar van a presentar alegaciones «porque nos parece que la norma es muy poco restrictiva respecto a las distancias y deja la puerta abierta a que alguna empresa pueda instalar un crematorio en zonas próximas a viviendas». A Guanyar también le preocupa otro de los puntos recogidos en la norma que establece que los crematorio podrán estar a menos de 200 metros de las viviendas si se presenta un estudio de dispersión de contaminantes. Desde Sanidad señalaron ayer que los ayuntamientos pueden desarrollar sus propias ordenanzas para regular la apertura de estas instalaciones.

La norma que prepara Sanidad contiene otros aspectos novedosos encaminados a reducir la emisión de gases contaminantes. Así, se deberán retirar los herrajes y otros elementos metálicos de los féretros, también los adornos hechos en resinas o plásticos. Los cadáveres tampoco podrán vestir ropas o abalorios con elementos metálicos.

Por último, Sanidad prohibe la cremación de personas con obesidad mórbida, ya que se necesita una cantidad muy elevada de combustible. Esto conlleva, añaden desde Sanidad, «que se produzca un aumento considerable de contaminación sobrepasando el umbral permitido».

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