La hermana Luisa María, nombrada directamente por el Vaticano como abadesa del monasterio de Santa Faz, explicó que están reestructurando la comunidad, no sólo en Alicante sino también en Murcia y en otras localidades, para «revitalizarla». Sor Luisa María afirmó que la Santa Faz seguirá en Alicante y que no se pondrá en riesgo la imagen que tanta devoción despierta entre los alicantinos ni a las hermanas, por lo que considera que no hay motivos para alarmarse. Sin embargo, fue contundente al ser preguntada si podía garantizar la continuidad de las actuales religiosas del convento. «No puedo garantizar nada. No sé lo que va a pasar mañana, sé lo que pasa hoy, y ellas están el monasterio y la Santa Faz también». «Hay que vivir el presente, estar tranquilas y seguir con nuestra vida de contemplación. No hay nada de momento de qué preocuparse», afirmó la abadesa, que compagina desde este año la dirección del convento alicantino con los de Murcia y Hellín (Albacete).