P¿Cuál es el perfil de las nuevas generaciones de personas mayores?
R Muy diferente. Hay un grupo de mayores numeroso muy formado. Incluso una parte de ellos ha crecido ya con las nuevas tecnologías y necesita de una participación activa en la sociedad.
P ¿Cómo se tiene que preparar la sociedad para atenderles?
R Sobre todo hay que escuchar a los mayores, saber sus necesidades y adaptar nuestra intervención a estos nuevos perfiles. Saber qué quieren y que formen parte del proceso activo de su vida. La sociedad tiene que escucharles, porque cuando la gente se hace mayor se les aisla pese a que son un potencial importante, un cúmulo de experiencias y de sabiduría.
P ¿Asistimos a una epidemia de soledad?
R Es un grave problema, pero también difícil de evaluar porque hay personas que están solas pero se sienten plenamente integradas en la sociedad y otras que viven en familia pero se sienten solas.
P El momento de la jubilación es clave, ¿qué aconsejan los psicólogos?
R Hay que establecer una continuidad con lo que hacían. Hay que volverse a inventar.
P ¿Es bueno que hayamos convertido a los mayores en cuidadores de nuestros hijos?
R Depende, a veces ese cuidado es deseado. Pero si les es una imposición y quita espacio para otras cosas la situación cambia.
P ¿Envejecer en una gran ciudad es más complicado?
R En una gran ciudad donde no hay vida de barrio o de vecindad es más difícil, pero también es cierto que los mayores buscan cada vez más oportunidades de agruparse.
