La Casa Carbonell, la joya arquitectónica de Alicante, está a punto de someterse a una operación para presentar un mejor aspecto exterior. La comunidad de propietarios del edificio, un Bien de Relevancia Local que empezó a construirse en 1920, ultima el proyecto de rehabilitación parcial que incluye la inspección, revisión y catalogación de carpinterías, cerrajerías, balaustradas y pavimentos, además del tratamiento de óxidos en elementos ornamentales y el tratamiento de fisuras y grietas en balaustradas y pavimentos.
Según la empresa contratada para los trabajos, el alicantino Grupo BDI, los técnicos han determinado que los problemas que presenta el exterior del edificio situado en la Explanada de España obligan a sanear los barandales metálicos y las mallorquinas. «En cuanto a las balaustradas y pavimentos, se prevé una inspección general de todos los balaustres y antepechos, además de atender aquellos problemas puntuales que presenten. Algunos balcones presentan de manera puntual fisuras que están lejos de ser preocupantes, pero como filosofía de este proyecto de reparación parcial se tendrán en cuenta», señalan desde la empresa encargada de una rehabilitación que se prolongará cuatro meses y cuyo inicio está pendiente de que se conceda la licencia municipal.
«Gran experiencia»
El hecho de tratarse de una joya del patrimonio alicantino, que además está catalogada com Bien Inmueble de Relevancia Local, según se recoge en las fichas del Catálogo de Protecciones que está pendiente de aprobación por el pleno municipal, hace que la actuación se vaya a llevar a cabo con más cuidado del habitual, tal y como reconocen desde BDI, la empresa responsable: «Son trabajos donde se requiere de una gran experiencia, ya que estamos tratando elementos del edificio con un gran valor arquitectónico, y su restauración precisa de una alta cualificación por parte de los operarios. Existen directrices catalogadas que hay que cumplir a la hora de hacer rehabilitaciones de edificios emblemáticos».
La obra sobre la Casa Carbonell, que aún no tiene fecha de inicio, no prevé «ocultar» el emblemático edificio tras un andamio, ya que los responsables de la actuación esperan que las actuaciones se realicen desde el interior de las viviendas, sin la necesidad de colocar un armazón sobre la fachada de un edificio que, según la empresa que se hace cargo de la rehabilitación, se encuentra en un estado óptimo, en términos generales: «El edificio presenta un buen estado de conservación, teniendo en cuenta que su antigüedad ronda ya el siglo. Eso demuestra que goza de una buena salud arquitectónica, sinónimo de calidad en su concepción y mantenimiento».
Según la ficha de la Casa Carbonell incluida en el proyecto del Catálogo de Protecciones, el edificio se encuentra en un solar resultante de la demolición de un mercado de abastos, ocupando una manzana completa al final de la Explanada. «En cada planta se proyectan cuatro pisos, donde es característica la existencia de un núcleo de escalera principal y otro secundario para el acceso independiente al área de servicio. La composición de la fachada se ajusta a las convenciones académicas y la ornamentación al gusto francés resulta recargada de elementos clásicos», explica el documento municipal.
