«Coco» hizo furor. Los disfraces sobre la película de Disney inspirada en el Día de Muertos de México triunfaron anoche en Alicante, donde la fiesta de Halloween eclipsa cada vez más a la tradición de Todos los Santos y llena la ciudad de colorido en la víspera de la visita a los cementerios. Centenares de familias tomaron las calles durante horas luciendo los disfraces más terroríficos, aunque son los niños y los más jóvenes los que más disfrutan de esta fiesta pagana de origen celta que básicamente consiste en reírse de la muerte.
Por todos los rincones había calaveras, fantasmas, esqueletos y personajes de terror. Desde Freddy Krueger a Maléfica, desde la bruja del cuento al diablo rojo con cuernos y tridente, monstruos de Frankenstein, Dráculas, zombis, monjas y exorcistas. Y mucho maquillaje, para convertir en terroríficos atuendos que poco tienen que ver con esta divertida fiesta del miedo, desde un vestido negro a una falda blanca de ballet.
En Alicante se celebraron catorce actividades relacionadas con Halloween, en su mayoría de dinamización comercial, además de fiestas organizadas por comisiones de Hogueras, con una elevadísima participación. Pero si hubo una fiesta multitudinaria fue la que cortó la calle Quintana, con más de 2.000 personas. Sobre todo familias con niños entusiasmados con el truco o trato, y con las decoraciones fantasmagóricas de los establecimientos participantes.
Era la quinta edición de la fiesta de Halloween de la calle Quintana, donde 15.000 pétalos de rosa marcaron el camino que une el cielo y la tierra en «Coco». Muchos niños llevaban la máscara de La Catrina, la calavera de la noche de muertos mexicana, y se fotografiaban ante los altares de muertos tradición en México, en honor del difunto, donde la familia coloca como ofrenda alimentos, velas, flores y objetos de uso cotidiano de la persona que partió hacia el más allá.
«Este año ha sido brutal. Impresionante, la calle está llena hasta arriba», afirmaba en plena actividad la presidenta de la asociación de comerciantes de Quintana y Adyacentes, Virginia Albero.
El colectivo organizó esta fiesta en la que se repartieron más de mil regalos, «con un éxito de participación tremendo teniendo en cuenta que en Alicante se celebraban otras trece acciones relacionadas con Halloween. Estamos muy contentos con la repercusión en los comercios», añadió Virginia Albero, en nombre de los 80 establecimientos participantes en la fiesta temática del día mexicano de los muertos, que incluyó un grupo de mariachis amenizando la calle.
En los escaparates decoraciones fantasmagóricas con telas de araña y guirnaldas de murciélagos se alternaban con otras más atrevidas como las calaveras con gafas en la óptica. En cuanto se corrió la voz se hizo una cola de niños que entraban al interior del establecimiento a por caramelos. Se los llevaban tras decir la mágica frase de truco o trato. En esta fiesta participó la concejala de Comercio, Marisa Gayo, que se disfrazó para dar su respaldo a las acciones de animación comercial por Halloween organizadas junto a la Cámara de Comercio, con apoyo de fondos europeos.
También en el paseo de Campoamor se celebró un concurso de disfraces y sorteos, y un desfile de muertos vivientes al ritmo de la canción «Thriller». Las hogueras optaron por talleres de máscaras y de tallado de calabazas para darles fantasmagóricas formas con motivo de «Al Hallows´ eve», una tradición que llegó a Estados Unidos con la inmigración irlandesa y que se ha contagiado a España.
