Las ramas de los árboles de la Rambla dejarán de tapar las farolas una vez que culmine la poda iniciada ayer por operarios de la contrata de Jardines del Ayuntamiento de Alicante, que ha dado orden de sanear el arbolado tras las quejas de vecinos y comerciantes por la deficiente iluminación de la céntrica avenida. Los colectivos ciudadanos consideran que una escasa iluminación crea inseguridad, sobre todo en invierno, y que el entorno pierde en atractivo para el turista.

El concejal de Infraestructuras, Medio Ambiente y Limpieza, Israel Cortés, explica que la poda de los árboles de la Rambla pretende «despejar de ramas las farolas y mejorar las condiciones de luminosidad por las noches». Desde el Ayuntamiento reconocen que la actuación da respuesta a la petición de los comerciantes y vecinos de la zona, que habían solicitado un adelanto de estas labores, debido al fuerte crecimiento del arbolado en el último mes, hasta tapar algunas de las luminarias, que tienen tres tulipas cada una de ellas. La asociación de vecinos del Centro Tradicional está contenta con el diseño actual de las farolas y no quieren que se cambien por otras pese a que a menudo los árboles tapan su luz. Consideran que las tulipas dan una luz demasiado cerrada y amarillenta, y también han pedido que la iluminación sea más potente y que no siempre se opte por cortar las ramas de los árboles puesto que su objetivo es dar sombra.

El edil Israel Cortés adelantó que existe un boceto de proyecto par resolver el problema específico del alumbrado de la Rambla, «que no es tanto de potencia como de diseño, ya que el arbolado lo condiciona». En este sentido, afirmó que se están estudiando las inversiones sostenibles para financiar la actuación.