Un millar de amantes de las fiestas de Moros y Cristianos celebraron ayer una jornada de convivencia para recordar a la sociedad la importancia de las tradiciones y la necesidad de despertar en los niños el conocimiento de la cultura, así como resaltar que las celebraciones populares son un elemento dinamizador de la economía por la atracción del turismo, además de su trascendencia social.

La Federación Alicantina de Moros y Cristianos celebró ayer su actividad en las antiguas cocheras del tranvía en Babel, con la participación de un millar de personas de todas las comparsas y cábilas de las fiestas federadas en la FAMYC, como son los Moros y Cristianos de Altozano, Villafranqueza-El Palamó y Rebolledo.

Desde las 9 de la mañana empezaron a llegar los festeros, mientras que a mitad de la mañana dieron inicio los juegos tradicionales para los pequeños y jóvenes.

La banda musical de la Sociedad Cultural de Carolinas fue la encargada de amenizar la actividad. Al mediodía, el alcalde de Alicante, Luis Barcala, acudió a la jornada para apoyar a los festeros y resaltar el vínculo vecinal que se genera con este tipo de iniciativas. Este evento cuenta con el patrocinio y colaboración de la concejalía de Fiestas.

Por su parte, los organizadores hicieron hincapié en que el objetivo de esta iniciativa es crear un hermanamiento entre los festeros que tienen en común determinadas tradiciones y que, en definitiva, tienen los mismos objetivos.