Operar sin necesidad de abrir al paciente a través de cirugía mínimamente invasiva. Lo que es una práctica habitual desde hace años en las intervenciones de los adultos, por fin es una realidad para los más pequeños.
El Hospital General de Alicante es el centro de referencia para operar a todos los niños menores de 15 años de la provincia y la mitad de las 1.600 operaciones que se llevan a cabo al año se hacen ya sin tener que abrir al niño, explica Jerónimo Gonzálvez, jefe del servicio de Cirugía Pediátrica en el centro sanitario. Hace apenas cuatro años no se hacía ninguna de esta forma. Este cambio ha sido posible gracias a la apertura hace cuatro años en el Hospital General de un nuevo quirófano infantil equipado con la más moderna tecnología y al desarrollo, por parte de las casas comerciales, de material específico mucho más pequeño, de apenas 2 milímetros, para operar a los niños a través de laparoscopia y así no tener que abrir el abdomen o el tórax.
Y es que la falta de espacio es lo que marca la diferencia entre operar a un niño o a un adulto. «Operar una malformación en el esófago de un recién nacido es como hacerlo dentro de una lata de refresco». Con este símil explica Jerónimo Gonzálvez las dificultades de espacio a las que se enfrentan cuando tienen a un niño de corta edad en la mesa de operaciones.
Entre las operaciones que ya se hacen de manera rutinaria en el centro sanitario sin necesidad de abrir, Jerónimo Gonzálvez destaca la eliminación de piedras dentro de uréter, las cirugías laparoscópicas en neonatos para resolver problemas congénitos o el abordaje del riñón y de la glándula suprarrenal por la espalda. De esta forma, se reducen los riesgos de las intervenciones y el tiempo de recuperación es mucho más corto para los niños, lo que paralelamente conlleva menos días de hospitalización.
La robótica
Precisamente estos avances fueron expuestos días atrás en una jornada organizada en el Hospital General de Alicante para conmemorar el día de la Pediatría. En la misma Gonzálvez habló de lo que está por venir, en especial de la cirugía robótica en niños. En España hay 50 robots en hospitales y en el Vall d´Ebron ya se opera a niños con esta tecnología de precisión. Para el responsable de Cirugía Pediátrica del Hospital General no estamos lejos de que este modelo se extienda a otros centros sanitarios, «puesto que en breve se liberarán patentes que harán que se abarate esta tecnología». También la denominada ingeniería tisular está llamada a revolucionar la cirugía pediátrica. «Se trata de materiales biológicos que se integran en el organismo y que se usan, por ejemplo, para reparar defectos en la pared del abdomen». Este tipo de materiales ya se utiliza de forma rutinaria en el Hospital General de Alicante.
En contraposición a esta revolución tecnológica, las dificultades en el campo de la cirugía pediátrica están provocadas por la baja natalidad que se registra desde hace años en los países desarrollados. «Cada vez nacen menos niños y eso puede ser una amenaza para la formación de los cirujanos», ya que necesitan adquirir destreza en este tipo de intervenciones, algo que solo se consigue con la práctica. En este sentido, Jerónimo Gonzálvez cree que sería conveniente que el Hospital General contase con un espacio para poder hacer simulaciones para que los cirujanos se preparen mejor para abordar este tipo de intervenciones.
