El aumento en cuatro millones de euros de las becas que la Conselleria Educación destina para escolarizar a los niños de 0 a 3 años no ha sentado nada bien a la patronal de las escuelas infantiles privadas homologadas.

Los 42 millones de euros que aprobó la conselleria el curso pasado en concepto de bono infantil han pasado a 46 millones para 2018-19, pero la citada patronal ha decidido recurrir judicialmente estas ayudas por considerarlas discriminatorias.

El TSJ ha admitido a trámite la demanda interpuesta por Acade, el sindicato mayoritario del sector, Fsie, la patronal Educación y Gestión, y la federación de centros Fedeval. «Todavía no sabemos cuánto toca a las escuelas infantiles privadas del total de ese presupuesto. Nos perjudica seriamente que familias que inicialmente fueron a centros públicos y han obtenido beca, después hayan optado por un centro privado por cuestión de horarios y no puedan venir con esa beca porque se la quedan en el centro», protesta el presidente provincial de Acade, Ramiro López.

Critica que en el caso de los centros de infantil privados, las becas corresponden a las familias, de forma que si se van a otro centro se llevan la ayuda «y nosotros no podemos sustituirla. Es claramente discriminatorio con respecto al proceder con los centros públicos», lamentan.

En su recurso jurídico contra las bases que regulan el bono infantil denuncian «el intento de hacer bipartidismo educativo creando diferencias donde antes no las había, eliminando la pluralidad, la diversidad y la libertad de elección de los padres».

Se quejan además de que las becas para los niños de 2 años en los centros públicos cubren del 100% del coste del puesto escolar, y en los centros privados homologados se distribuyen en función de la renta per cápita familiar y de la edad de los niños escolarizados. El bono en estos casos oscila entre los 70 euros y los 220 euros al mes.

«El bono infantil se creó como medida para favorecer la iniciativa social en el desarrollo de la actividad escolar, y facilitar la libertad de elección de los padres a la hora de recoger el centro en el que quieren formar a sus hijos», señalan los demandantes.

Como las ayudas gratuitas al cien por cien creadas por primera vez este año por Educación se dirigen únicamente a niños de 2 años en centros públicos, desde Acade temen que llegue un momento en el que «no podremos competir y nos veremos abocados al cierre, porque dos de cada tres puestos en nuestras escuelas los ocupan niños de 2 a 3 años».