n La Universidad de Alicante admite que se produjo en su día una situación «rara», pero rechaza que haya habido perjuicios laborales para las personas que en su momento cursaron el grado de Ingeniería de Edificación. El vicerrector de Estudios y Formación de la UA, Enrique Herrero, explicó que el Ministerio de Educación sacó en su día unas órdenes para unos títulos en profesiones reguladas y permitió varios nombres para los grados, que en el caso de la UA eligió Ingeniería de Edificación.

Las universidades «más avanzadas» ya tenían el título aprobado en el Consejo de Ministros, pero los colegios de ingenieros empezaron a poner demandas y a ganar juicios, de modo que el Ministerio paralizó la publicación de los que no lo tenía, como fue el caso de la UA.

«Nos encontramos con universidades que hicieron los trámites rápidos y lo pudieron expedir, otras como la de Alicante que no pudieron hacerlo, otras que cuando empezaron el proceso implantaron el grado con el nuevo nombre y otras que permanecen en un limbo legal», dijo el vicerrector.

En cualquier caso, Herrero lo tiene claro: «Contra una sentencia judicial, no se puede hacer nada». De hecho, recordó que al Vicerrectorado han llegado recursos, «pero los servicios jurídicos nos han dicho que no hay opciones».

Preguntado sobre el perjuicio profesional para los que cursaron el grado, rechazó esa afirmación: «Las competencias de las atribuciones profesionales no se han visto afectadas, la profesión regulada en España es arquitecto técnico».