n El expediente de sanción abierto este verano a una guía turística que ejercía sin la acreditación oficial en el municipio castellonense de Vilafamés ha destapado la existencia de un nueva modalidad de fraude el sector turístico, el intrusismo en la profesión de guía, una actividad en manos de pequeñas empresas que se nutren, casi exclusivamente, de profesionales autónomos que han pasado el examen de Turismo. La ciudad de Alicante es el epicentro de esta práctica en la que todos los días trabajan en sus calles personas que no pertenecen a la asociación profesional, ni tienen la titulación pertinente en lo que constituye competencia desleal a los profesionales con su acreditación y un fraude fiscal, porque en muchos casos todo se cobra en «b», ya que estas excursiones por el casco urbano se disfrazan bajo el título de «free tours» (excursiones gratis) o a la voluntad del turista que conoce los rincones de Alicante o cualquier localidad turística de la mano de estos «intrusos».
Fraudes
Turismo no tiene abierto, de momento, ningún expediente de sanción contra el intrusismo en el trabajo de los guías turísticos, pero han comenzado a darse los primeros pasos como es el hecho que los guías oficiales recurran a la Policía Autonómica para que identifiquen a los guías que trabajen sin la acreditación. En principio, la medida ha comenzado en el castillo de Santa Bárbara de Alicante, donde los guías cuentan con las llaves de muchos aposentos de la fortaleza.
Existen tres tipo de fraudes. Los guías que trabajan sin contar con la acreditación oficial, aquellos que llegan desde otros puntos de España y deciden establecerse sin solicitar los documentos y, por último, aquello que ofrecen sus servicios sin tener ni la acreditación, ni son autónomos y, encima, se publicitan en las redes como guías de excursiones gratis, según denuncia Ivan Llorca, 24 años de profesión y presidente de la Asociación de Guías Turísticos de la Comunidad.
