No todos los sindicatos representados en la mesa sectorial de Sanidad firmaron el viernes el acuerdo propuesto por la Conselleria de Sanidad para cerrar la crisis del transporte sanitario de las urgencias extrahospitalarias. El sindicato CSIF optó por no firmar un acuerdo que considera que se queda «cojo» e incluso ayer avisó de la convocatoria de nuevas movilizaciones de profesionales si estos «así lo demandan».

El acuerdo presentado por Sanidad proponía poner a disposición de los profesionales de los Puntos de Atención Continuada (PAC) -los centros de salud que operan por las tardes y noches- vehículos con conductor para sus salidas domiciliarias. Además, los profesionales de los centros de salud de Atención Primaria dispondrán también de vehículos rotulados para sus visitas. Con esto, la Conselleria pretendía cumplir con la Inspección de Trabajo que había urgido a dar soluciones para no obligar a los trabajadores a usar sus propios vehículos en estas salidas, tras la retirada de las ambulancias no asistidas y las denuncias presentadas por ello por los sindicatos.

Pese al acuerdo unánime del resto de formaciones, para CSIF (la cuarta formación en representatividad en el área de salud) la propuesta «debe mejorarse» para abarcar a todos los desplazamientos de los profesionales ya que todavía se les exponía. «Conselleria no asume que los desplazamientos de asistencia domiciliaria deben prestarse siempre con medios de la conselleria», incluido conductor y, con esta solución, aún se les expone a usar «su carné de conducir particular para una actividad profesional a terceros».

Desde el sindicato apuntaron también que la asistencia al ciudadano iba a «empeorar» ya que la cifra de vehículos con conductor puesta sobre la mesa era de «24» mientras que antes las ambulancias a disposición para las salidas eran 56. Además, según el sindicato, el acuerdo «no tiene en cuenta las particularidades de determinados departamentos con grandes distancias».