La decisión de la conselleria de abrir los colegios castellano hablantes a los profesores interinos que no tienen la capacitación de valenciano no ha sentado nada bien a los representantes de los padres de alumnos de la Confederación Gonzalo Anaya.

El colectivo de las familias exige a la Conselleria de Educación "garantías" sobre la capacitación del profesorado en la enseñanza lingüística "en toda la Comunidad porque los alumnos de las zonas castellano hablantes tienen los mismos derechos a un aprendizaje plurilingüe de calidad", señalan en un comunicado.

Los padres muestran su "sorpresa" ante la decisión que ha adoptado Educación par cumplir el mandato aprobado por las Cortes Valencianas al término del curso escolar, y califica de "paradójica" la situación que se crea justo "después de la aprobación de la nueva Ley de Plurilingüismo".

"Las familias de la escuela pública hemos defendido desde siempre la enseñanza plurilingüe en las aulas públicas y precisamente, desde esta postura, hemos valorado favorablemente la puesta en marcha de la actual Ley de Plurilingüismo por considerarla un paso hacia adelante en la mejora de la enseñanza", apuntan desde la entidad.

Subrayan que iniciar el plurilingüismo es "beneficioso" para la formación de los alumnos, pero por otra parte consideran que "no es muy coherente si, al mismo tiempo, la Conselleria de Educación decide destinar al profesorado que todavía no tiene la titulación acreditativa de competencias lingüísticas a las zonas en las que mayoritariamente se aprende en castellano".

"Creemos que es precisamente en estas zonas a las que más recursos se tendría que destinar para revertir una situación de habla mayoritariamente monolingüe", indica el presidente de la Confederación, Txomin Angós y a su vez máximo representante de la federación provincial de Alicante Enric Valor.

Angós añade que "siempre hemos sostenido que la enseñanza plurilingüe es un valor añadido para la formación de nuestras hijas e hijos y cuántas más lenguas aprendan mejor", pero si queremos avanzar en estas zonas, la conselleria tendría que destinar más recursos educativos en las localizaciones que por tradición o circunstancias hayan tenido hasta ahora una educación monolingüe".

Es la única forma, sostienen, de que "nuestros hijos e hijas que cursan sus estudios en las zonas castellano parlantes, tengan los mismos derechos para aprender lenguas que otros niños y niñas otras zonas".

La confederación subraya que "si en lugar de apoyar en los centros donde más falta hace impulsar la iniciativa lingüística, les restamos oportunidades para impartir clases en valenciano, en inglés o en otras lenguas, destinando profesorado que no está debidamente calificado, estamos dando pasos hacia atrás en el aprendizaje lingüístico".

"Cuantos más conocimientos tengan nuestras niñas y niños, más oportunidades tendrán en un futuro para contribuir a mejorar y superar nuestra sociedad en una más justa e igualitaria", insiste Angós.

También puntualiza que "las familias quieren un profesorado debidamente formado, no solamente en materia lingüística, sino que sean sabedores de contenidos actualizados en todas las materias que imparten y que dispongan de las certificaciones que garanticen su competencia. Todos los niños y niñas de la escuela pública tendrían que tener las mismas oportunidades de aprendizaje independientemente de la localidad o la provincia en la cual estudian", concluye.