La pequeña localidad de Algueña fue la que más sintió el temblor de tierra en la provincia con una intensidad de 5. Al carnicero se le cayeron los artículos de las estanterías y en algunas viviendas aparecieron pequeñas grietas y se rompieron tazas y elementos decorativos. Los clientes de bares y restaurantes salieron a la carrera y el susto fue «muy grande».