El grupo municipal socialista considera que el PP que gobierna en el Ayuntamiento de Alicante ha cedido a las presiones de la edil tránsfuga Nerea Belmonte para que llevaran por urgencia a la Junta de Gobierno una modificación del Reglamento Orgánico de Pleno (ROP) que reconozca los derechos a los ediles no adscritos.

La Junta de Gobierno aprobó el martes la propuesta de reconocimiento de derechos políticos a los concejales tránsfugas, como asistencia a comisiones y presentación de mociones, a raíz de un requerimiento de Belmonte exigiendo que se diera trámite a una sentencia del Tribunal Constitucional en este sentido. El PSOE, sin embargo, considera que llevar el asunto a aprobación de la Junta por vía de urgencia es «una muestra más de la oscuridad que rodea la llegada de Barcala a la Alcaldía». El punto ha de pasar por Pleno.

Los socialistas ven cada día más clara la relación entre el voto de Belmonte y la vuelta de los populares al poder. «Todo lo que rodea al PP respecto a la señora Belmonte tiene un color turbio», señaló ayer el portavoz adjunto del PSOE Miguel Castelló, que hizo también referencia al asesor ya cesado por Barcala que realizaba presuntamente tareas para Belmonte.

«El PSOE siempre ha estado a favor de la modificación del ROP para que todos los concejales puedan tener derechos políticos y económicos, pero la señora Belmonte traicionó el mandato de las urnas y provocó un cambio de gobierno municipal. Ha pasado a ser una tránsfuga», señaló Castelló.

Fernando Sepulcre

El otro edil no adscrito de la Corporación, Fernando Sepulcre, está muy de acuerdo con la modificación del ROP porque «los concejales no adscritos tenemos los mismos derechos que los demás, y, aunque no sea bajo unas siglas, trabajamos por Alicante y asistiremos a las comisiones necesarias».