El grupo municipal de Guanyar acusa al PP que gobierna el Ayuntamiento de Alicante de ralentizar la aprobación de la ordenanza de protección animal al plantear modificaciones al documento, como la supresión de la prohibición de animales en los circos. Según Guanyar, esos cambios iban más allá de las enmiendas que en su día plantearon tanto los populares como Ciudadanos al texto que impulsó el tripartito cuando dirigía el Gobierno local. Fue la edil Marisol Moreno, que llevaba Protección Animal en esa etapa desde Guanyar, la que elaboró el texto.

Tanto el portavoz de la formación, Miguel Ángel Pavón, como la propia Moreno acusan al PP y a la actual concejala de Protección Animal, Marisa Gayo, de retardar conscientemente la aprobación de la ordenanza introduciendo cambios, como eliminar la prohibición expresa de circos con animales en el término municipal de Alicante, que en su día no cuestionó el veterinario municipal.

Ahora este funcionario sí que propone suprimir de la norma el veto a estos espectáculos, que fue lo que se plasmó en el proyecto de modificación que se aprobó en octubre de 2017, cuando gobernaba la izquierda, para actualizar una ordenanza que lleva aplicándose 15 años.

«El PP y Gayo deberían haberse limitado a resolver las enmiendas presentadas y llevar la ordenanza a aprobación inicial al Pleno. En fase de alegaciones se podrían haber introducido las modificaciones que ahora pide el veterinario, que antes nunca planteó. Al menos se habría avanzado en la tramitación de la ordenanza», señalan Pavón y Moreno.

Guanyar criticó que el PP aprobara en la Junta de Gobierno otro texto de ordenanza introduciendo las modificaciones del veterinario «que ahora tendrán que volver a someterse a las enmiendas de los grupos políticos, retrasando la aprobación inicial de la ordenanza. Es el minigobierno del PP el que con sus decisiones es el responsable de que la aprobación inicial de la ordenanza no vaya al Pleno de hoy». Los populares dijeron que no se puede incluir en la ordenanza algo que no permite la ley, en referencia a que la norma municipal chocaría con la ley autonómica que no prohíbe expresamente los circos con animales.