? Nadie se explica el fracaso que ha tenido el centro de ocio Panoramis, ubicado en uno de los mejores enclaves de las fachada marítima de una ciudad que siempre le dio la espalda. Junto al Club de Regatas, a dos pasos de la Explanada y al final del paseo del Puerto, Panoramis se fue convirtiendo en un lugar maldito en el que llegó a cerrar, incluso, una hamburguesería de la cadena McDonalds, tras lo cual se inició un declive que lo llevó a convertirse en un fantasmal. F. J. B.
