El turista que el pasado viernes se despeñó desde el Castillo de Santa Bárbara mientras hacía fotos está en estado crítico. El joven italiano, de 23 años, permanece desde el día del accidente ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital General de Alicante sin que se haya producido una mejoría de las graves heridas que sufrió al despeñarse.

Su estado, según han confirmado fuentes del centro sanitario, es extremadamente grave. A consecuencia de la caída, desde 25 metros de altura, sufre traumatismos por todo el cuerpo. El que mayor gravedad reviste es el que sufrió en la cabeza. Los médicos se han llegado a plantear repatriar al joven a su país de origen, pero su estado es tan delicado que temen que pueda fallecer durante el traslado.

El accidente tuvo lugar a primera hora de la mañana, cuando el joven visitaba la fortaleza y accidentalmente, mientras hacía fotografías, resbaló y se despeñó por la zona conocida como el Baluarte de la Mina, desde una altura de 25 metros.

El turista cayó a una zona de difícil acceso, por lo que fue necesaria la intervención de los bomberos y del helicóptero del Consorcio para su rescate.

En un primer momento, el herido fue trasladado hasta el Parque de Bomberos de San Vicente y, de ahí, al Hospital General de Alicante. El joven italiano fue operado por los neurocirujanos del centro hospitalario para descomprimirle varios hematomas. Desde entonces, permanece ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos.

En un primer momento tras el accidente, los equipos de rescate barajaron todas las posibilidades en torno a este suceso, desde una caída voluntaria hasta una accidental mientras escalaba. Pero fuentes policiales confirmaron finalmente que la caída del joven fue un accidente y que se produjo mientras se hacía un selfie.

Segunda caída en un año

Se trata de la segunda caída desde el Castillo de Santa Bárbara que se registra en menos de un año. De hecho, en agosto del año pasado, una mujer sueca de unos 41 años se precipitó desde una altura de ocho metros, cuando estaba sentada en un muro sin que se llegaran a esclarecer las causas. Tras dos días de pesquisas, la Policía averiguó que la herida era una mujer que había estado ingresada en la Unidad de Psiquiatría del Hospital de Sant Joan, al parecer con brotes psicóticos. La mujer había salido del hospital el mismo día en que sucedió el incidente.