El Ayuntamiento de Alicante ha recurrido a un contrato menor para el servicio de atención en playas a personas con diversidad funcional. Ante este hecho, el grupo municipal de Ciudadanos denunció ayer, a través del edil Vicente Buades, que «en plena temporada alta no esté licitado aún el servicio de atención en playas para las personas con diversidad funcional, algo que nos parece insólito y que denota una absoluta falta de sensibilidad».

En opinión de Buades, la concejala de Turismo, Mari Carmen de España, «que tanto bramó el año pasado con estas cuestiones, comete ahora los mismos errores que su antecesora». En este contexto, el edil subrayó que «la Concejalía de Turismo, según ha podido constatar este grupo municipal, ha tenido que recurrir a una contratación menor, de menos de 15.000 euros según la nueva ley, para hacer una adjudicación exprés, a dedo, por el periodo de una semana y salir así del paso, es decir a salto de mata».

Cabe recordar que este contrato se formalizó en 2017, con casi dos semanas de retraso, por importe próximo a los 100.000 euros. En el mismo se incluían servicios pedagógicos y lúdicos en las áreas delimitadas para tal efecto en San Juan, Postiguet y Urbanova, así como el cuidado y la asistencia en el baño.

«No podemos permitirnos dar una imagen tan penosa para las personas con diversidad funcional que tienen todo el derecho del mundo a disfrutar de nuestras playas, y es aquí donde se pone en evidencia la efectividad de las políticas de integración con determinados colectivos vulnerables, es decir, evitar cualquier tipo de agravio comparativo», expresó el concejal. En este contexto, Cs denunció también que las pasarelas están mal colocadas, a media altura, dificultando el acceso a la primera línea de playa para esas personas.

No es la primera vez que ocurra esta situación. Ya el pasado año, el equipo de gobierno no sacó a licitación el servicio hasta el mes de julio.

Desde Cocemfe Alicante han lamentado en varias ocasiones que para las personas con movilidad reducida de la ciudad el verano empieza mucho más tarde que para el resto de ciudadanos y turistas.

Mientras que la apertura de las playas ha dado comienzo otros años el 15 de junio, para las personas con movilidad reducida lo ha hecho el día 1 de julio. Esta situación, a juicio de los responsables de Cocemfe, «genera desventaja y agravio comparativo con playas vecinas que sí ponen el servicio en funcionamiento en tiempo y forma».

Las áreas especiales de las playas de Alicante cuentan con dos tipos de servicio; uno, para personas con discapacidad intelectual donde se asiste, se atiende y se organizan actividades lúdico pedagógicas y otro servicio de acompañamiento y asistencia al baño para personas con diversidad funcional y movilidad reducida, con material técnico de apoyo al baño y monitores especializados, fundamental para que el colectivo pueda disfrutar de un baño seguro.