Apenas un mes y medio de anunciar, a través de un comunicado de prensa, que una subvención europea iba a permitir al Ayuntamiento de Alicante contratar a más de 400 jóvenes «para trabajar en diferentes áreas municipales durante un periodo de doce meses», el gobierno dirigido por el popular Luis Barcala ha renunciado a la incorporación de más de 250 [se prevé contratar a unos 150] pese a la subvención de 6,7 millones de euros recibida dentro del marco del Fondo Social Europeo del Sistema Nacional de Garantía Juvenil. Y todo, según fuentes de la Concejalía de Recursos Humanos, por «falta de presupuesto».

Y es que el ejecutivo local del PP tendría que destinar unos 2,3 millones para completar los sueldos de los contratados dentro de un programa cuyo objetivo principal es «fomentar el empleo para la contratación de personas jóvenes», según explicó el Ayuntamiento en un comunicado, fechado en mayo de 2018, en el que el concejal de Recursos Humanos, el popular José Ramón González, destacó la importancia para el Consistorio de «triplicar la subvención que concedida este año por el Servef y para poder así contratar por vez primera a 400 jóvenes que van a optar a trabajar muchos de ellos por vez primera durante un año en el Ayuntamiento».

El concejal González señaló ayer que el anterior gobierno, dirigido por el PSOE, «sólo dejó una partida de 300.000 euros» para completar el sueldo de los más de 400 jóvenes que se preveían contratar a partir de este verano gracias a una subvención europea gestionada a través de la Generalitat. «Para los nuevos, hay 300.000 euros, por lo que no podemos contratar a más de 400 jóvenes, que era lo previsto. Hemos tenido que adecuar el dinero que hay a la contratación», argumentó el edil del PP. Desde el PSOE, el anterior responsable de Recursos Humanos, el concejal Carlos Giménez, criticó que la parálisis en la gestión de los populares suponga la renuncia a contratar a más de 250 personas durante un año. «Al igual que van a hacer para intentar cancelar el Plan de Ajuste, podrían hacer una modificación de crédito para habilitar una partida con el dinero suficiente, que podría ser un millón este año y otro para el que viene, es una cuestión de voluntad. Demuestran que hacen anuncios que luego no llevan adelante», señaló ayer el socialista Giménez.