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De la barra del bar al Mundial

Cuatro alicantinos crean un equipo de lacrosse y cinco años después forman acuden al campeonato internacional en Israel

De la barra del bar al Mundial

Hace cinco años y sobre la barra de un bar, como empiezan las historias con tendencia a acabar plasmadas en papel. Fue concretamente sobre una que pisa la calle Canalejas; el sol ya había caído y tres amigos sujetaban una jarra como previa de la noche del sábado. Uno de ellos contaba su primera experiencia con un deporte poco conocido por aquí, el lacrosse, hasta que pasó lo que pasó: «¿y si montamos un equipo?». La idea gustó de inmediato y la cerveza ayudó a conseguir un «sí» unánime. Fue entonces cuando nació el primer conjunto de esta modalidad en la provincia, que despegaría hasta alzarse con la Copa de España tan solo tres años después o, como hace ahora, saltar al ámbito internacional con la participación de cuatro de sus integrantes en el Mundial de lacrosse, un juego que consiste en que los jugadores portan un bastón con una red en uno de los extremos con la que hay que meter una pelota de goma en la portería.

Luis, Josep, Daniel y Javier son los nombres de los cuatro jugadores alicantinos que cogen este viernes un vuelo en dirección a Netanya, Israel, para disputar la máxima competición internacional junto a la selección española. Lo hacen con una ilusión tremenda, acompañados de otros 19 practicantes y desde el seno de un equipo local que se gestiona sin ningún tipo de soporte externo.

Javier fue el que lanzó la pregunta, jarra en mano, cinco años atrás. Hacía muy poco que un compañero de la facultad de medicina en Madrid le había dejado probar uno de sus palos. «Me pareció que era una pasada y que mis colegas de Alicante tenían que probarlo», cuenta Javier Pérez-Coca, médico residente en el Hospital General de Alicante.

Luego convencieron a varios amigos, consiguieron material, hicieron de la arena de la playa de San Juan su lugar de entreno y se pusieron nombre: Alicante Barefoots. Al parecer, las suelas de zapato no eran la devoción del equipo. Lo que sí que les motivaba, sin embargo, era la proyección que iba agarrando la idea.

El grupo fue cogiendo forma y Javier, por ejemplo, llegó a participar en el Mundial de 2014. «Es increíble el poder que tiene el lacrosse alrededor del mundo. Otra dimensión. Nos pedían hasta autógrafos por la calle», explica Pérez-Coca sobre la competición que tuvo lugar en Colorado (Estados Unidos), para la que reconoce que «estaba muy verde» pero «hacía falta en el equipo». En España el lacrosse no puede crear una federación porque son necesarias 500 fichas y hay 300 jugadores.

Un año después, en 2015, Luis Naranjo se sumaba a Alicante Barefoots. Este estudiante de magisterio había empuñado su primer stick en el otro lado del charco, pero ahora quería conocer en profundidad la disciplina. Junto a otros once compañeros y con gran motivación, se preparaba para estar en forma incluso utilizando la pared del parque para hacer rebotar la pelota durante las noches de verano con sus amigos.

La salida de Luis hasta entrar en la lista para Israel se disparó desde el mismo sitio que el resto. Se abrieron entrenamientos en Madrid a comienzos de 2017 y desde entonces se han ido sucediendo, con un torneo en Manchester de por medio, hasta cerrar la convocatoria con 23 nombres. Al mando de todos ellos, el inglés Mike Bartlett. «Desde que le contrataron como seleccionador el nivel está subiendo muchísimo», apunta Josep Casuto.

Este jueves presentan al equipo español en Madrid, el viernes vuelan a Netanya y, tras las concentraciones del fin de semana, se medirán sobre el terreno de juego con Nueva Zelanda el jueves 12. «La diferencia de nivel respecto a otros países es abismal. No podremos competir por la victoria del torneo, pero cualquier rival va a tener un partido difícil», se sincera Naranjo.

Para poner los partidos difíciles, España guarda un as que se llama Daniel de la Casa. Con su familia en Mutxamel, de la Casa hace su vida en Toronto, Canadá, con una presencia del lacrosse inmensa. «A quien le preguntes te lo va a decir: es el mejor jugador de la historia de España. Es un espectáculo verle jugar», cuenta Naranjo con gran admiración. «De los 150 tantos que ha podido meter España lacrosse en sus años de vida, él ha anotado 110», añade.

No es lo común. No suele pasar aquello de que ciudades que no sean Madrid o Barcelona pongan tanto de su parte en el proyecto. «Que una ciudad como la nuestra tenga cuatro participantes en el Mundial dice mucho de Alicante Barefoots, de cómo hemos movido el deporte y del trabajo que hemos hecho», asegura Naranjo.

Ahora este deporte, un gran desconocido en nuestro entorno, despega con las ideas claras en dirección a Israel. Y lo hace con el apoyo de aquello que se fraguó hace cinco años sobre una barra de la calle Canalejas.

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