La Conselleria de Vivienda ha incorporado al plan autonómico para la rehabilitación de viviendas dos programas nuevos, la mejora de la eficiencia energética y de la accesibilidad de los pisos, muchos propiedad de personas mayores que, incluso, carecen de ascensor. En total, la Conselleria invierte este año un total de 21 millones de euros, frente a los 14,6 millones de la convocatoria del año pasado. Otra novedad es el aumento del porcentaje de las ayudas ya que, según los ingresos de las familias, éstas tendrán una ayuda adicional, algo que también beneficiará a las personas mayores de 65 años o con diversidad funcional.
El objetivo de las ayudas incorporadas al tramo autonómico del Plan Vivienda 2018-2021 es que los propietarios puedan acometer actuaciones que mejoren la sostenibilidad de la vivienda desde el punto de vista ambiental con mejoras como elementos que reduzcan el uso de energía eléctrica y el consumo de agua, o mejoras en los sistemas de refrigeración y calefacción. Otro objetivo es facilitar la accesibilidad a los pisos.
La Conselleria de Vertebración del Territorio ha duplicado, en este sentido, el presupuesto del tramo autonómico del Plan para la Rehabilitación de la Vivienda (Renhata), que beneficiará a unas 1.500 familias -interiores y accesibilidad de sus pisos-. Entre las novedades destaca, además, del aumento del porcentaje del presupuesto a subvencionar, el que se incluye también una ayuda básica para costear los proyectos técnicos con lo que el apoyo alcanza el 35% de la obra total con un máximo de 4.200 euros por piso. Se facilitan también las condiciones de acceso para las personas con discapacidad funcional y se elimina el presupuesto mínimo en los casos en los que la discapacidad sea igual o superior al 50% o se trate de personas mayores de 65 años las que soliciten la ayuda.
La consellera María José Salvador espera que la inversión de la Generalitat repercuta también en el sector de la construcción con un impacto de 17,5 millones de euros.
La Conselleria admite también solicitudes que se quedaron fuera en la convocatoria del año pasado. Recordar que las obras susceptibles de recibir ayudas de 2017 son las que se hayan terminado entre el 18 de mayo del año pasado y el próximo sábado, 30 de junio.
En la provincia de Alicante existen 86.214 edificios construidos antes de 1960, de los que la conservación de 22.521 está considerada como mala o deficiente; 1.568 se consideran en ruinas y 62.125 en buen estado. Según los arquitectos, unos 45.000 inmuebles son susceptibles de someterse a una rehabilitación, tanto exterior como interior.
Evaluación de los edificios
El Consell aprobó el pasado abril un decreto que regula el contenido y formalización del Informe de Evaluación del Edificio aplicable a los edificios para uso residencial con viviendas, tanto unifamiliares como plurifamiliares (chalets, bungalows y villas), así como su tramitación y registro oficial.
Es obligatorio para los inmuebles de más de 50 años y para poder acceder a las ayudas a la rehabilitación como las que afectan los programa de mejora de eficiencia energética y accesos. Además, señala las deficiencias constructivas, funcionales, de seguridad o de habitabilidad en fachadas, suelos, estructuras, medianeras o cubiertas, con el fin de advertir y orientar sobre las acciones para mantener el adecuado estado de conservación.
