? Al final impera el sentido común y el PP, que se agarró a la normativa para echar fango sobre la gestión de la exconcejala de Turismo, Eva Montesinos (PSOE), se traga sus palabras y «disfraza» la oficina de turismo de estructura desmontable para evitar el ridículo y que se perdieran 700.000 euros de fondos públicos. Es complicado explicar que en una semana se haya pasado de la negativa más feroz, a encajar la oficina sobre un aparcamiento público que se ha tenido que reforzar.