El alcalde de Alicante, Luis Barcala, ha confirmado esta mañana el "cese fulminante" del asesor Miguel Ángel Redondo "por pérdida de confianza".

El cese de este trabajador se produce después que este periódico haya desvelado hoy que declaró haber cobrado en negro de Ciudadanos y Cruz Roja, además de haber recorrido instituciones alicantinas buscando «rehabilitar» la imagen de la edil tránsfuga Nerea Belmonte.

Barcala ha explicado que contrató a este asesor por sus "muy buenos contactos" con el tejido vecinal y asociativo de la ciudad. Su tarea era "peinar la ciudad" junto a otros dos trabajadores para alertar de desperfectos y daños en infraestructuras.

El primer edil ha indicado que le conoció durante la pasada campaña electoral por verle en distintos actos con el que fuera candidato a la Alcaldía de Ciudadanos, José Luis Cifuentes, que dimitió meses después de convertirse en portavoz municipal de la formación.

Al llegar el PP al gobierno municipal, Redondo se ofreció como asesor y se le contrató, ha precisado Barcala, quien ha subrayado que al tener conocimiento de sus declaraciones en instituciones en apoyo de Nerea Belmonte, "que están fuera de lugar", y sus presuntos cobros en B, se ha producido una "pérdida de confianza" que ha abocado en su despido "para no generar la más mínima duda".

Barcala ha recordado, ante la exigencia de explicaciones de los grupos de la oposición, que "en este Ayuntamiento ha habido asesores imputados y se les mantuvo en el puesto", en alusión a Pedro de Gea y Lalo Díez, en contraposición a la decisión tomada por su gobierno en cuanto ha tenido conocimiento de los hechos en torno a Miguel Ángel Redondo.

Asesor de Belmonte

Cuestionado sobre su posible asesoramiento a Belmonte, Luis Barcala ha indicado que "siendo muy grave" le ha dado "igual" porque "no ha sido concluyente", aunque lo ha reiterado que es "muy grave" porque no estaba contratado para "eso" y "no podía tener autorización para ir hablando así".

Sin embargo, ha señalado que se han comprobado "antecedentes" de los que no se tenía "conocimiento" y que, por ello, se ha perdido "totalmente la confianza".

Preguntado por la posible vinculación al voto en blanco de Belmonte que le hizo alcalde, Luis Barcala ha dicho que no entendería esa vinculación y se ha planteado que en este mandato los asesores ha sido un tema "controvertido".

Por ello, ha hecho referencia a que se mantuvo a dos asesores del exalcalde socialista Gabriel Echávarri --su jefe de Gabinete y su asesor en Comercio--, a pesar de estar "procesados" en el caso Comercio.

"Tenemos que ser mucho más estrictos" para tomar decisiones antes de que se produzcan "situaciones anómalas" de ese calibre, ha argumentado. "Se toman cuando surge la más mínima duda", ha subrayado para evitar "sombras de sospecha" y ha resaltado que quien vincule "unas cuestiones a otras, lo tendrá que demostrar".

Nuevo asesor

Luis Barcala ha dicho que con su cese la cuestión está "completamente zanjado" para el equipo de Gobierno. Además, preguntado sobre si se le iba a buscar sustituto para el equipo del que formaba parte en Infraestructuras, el alcalde ha asegurado: "Los equipos los tenemos completos y buscaremos pero, evidentemente, siendo bastante más exhaustivos para ver quién es quién".