El juez que investiga el asesinato de la viuda del expresidente de la CAM ha emplazado al sospechoso del crimen a que comparezca ante el juzgado para facilitar las claves de acceso a la nube de sus dispositivos, según la resolución a la que ha tenido acceso este diario. La providencia se dicta ante la dificultad que está teniendo la Policía para recuperar esa información de los dispositivos intervenidos a Miguel López, yerno de la víctima y sospechoso del crimen.

María del Carmen Martínez murió tiroteada el 9 de diciembre de 2016 cuando recogía su coche de las instalaciones de Novocar, empresa de automoción que regentaba Miguel López. El sospechoso fue arrestado poco menos de dos meses después, el 8 de febrero, aunque el 20 de marzo el juez le fijó una fianza de 150.000 euros, con la que salió de prisión. López ha defendido en todo momento su inocencia.

López ha sido emplazado para que el próximo 28 de junio comparezca ante el juzgado a efectos de facilitar su correo electrónico y las claves de su cuenta de iCloud de su móvil y de su tablet, en caso de que éste considere que le conviene para su derecho de defensa.

En la comparecencia estarán presentes agentes de la Policía Científica para extraer la información de los dispositivos, obteniendo una copia autentificada mediante firma digital. El magistrado José Luis de la Fuente ofrece la posibilidad al investigado que en el acto esté presente un perito en su representación para que se realice también una copia de esta información.

La petición fue planteada por el abogado de la acusación particular que ejerce el primogénito de María del Carmen Martínez a tenor de las dificultades que estaba teniendo la Policía para acceder al contenido de los dispositivos intervenidos a Miguel López el día de su detención, el 8 de febrero de 2017.

El informe policial sobre el contenido del móvil, la tableta y el ordenador portátil del sospechoso es la única prueba pendiente para poder acabar con la instrucción y enviar el asunto a juicio. El asesinato será enjuiciado por un jurado popular en la Audiencia Provincial.

Tal como publicó este diario, López ya tuvo que entregar la clave de su ordenador a la Policía el pasado diciembre por las dificultades para acceder a su contenido, con el recordatorio de que esos datos ya se los había facilitado a los investigadores el mismo día en que se produjo su arresto (aunque en uno de los casos había un dígito ilegible).

Los dispositivos a los que había podido acceder la Policía hasta entonces, como son dos discos duros, no habían arrojado datos relevantes para la investigación. Ya con las claves, los mismos problemas se dieron para el acceso a su contenido en la nube.