El PP activa el cambio de calles franquistas tras las críticas por ralentizarlo

Entre las palabras de De España y las de Padilla, la oposición salió en bloque ayer a criticar al PP por querer ralentizar la retirada de calles franquistas de la ciudad. A principios de este año, las Juntas de Distrito ya pusieron sobre la mesa sus propuestas para renombrar el callejero. Previamente, en diciembre, el pleno municipal, por unanimidad, aprobó la retirada de unas cuarenta calles con nombres de connotación franquista, como la plaza de la División Azul o el barrio José Antonio, entre otros.

Marcha atrás

A través de un mensaje de voz, minutos antes de las 11 de la noche del lunes, la concejala Mari Carmen de España señaló que el gobierno municipal iba a «iniciar un proceso de participación para la nueva denominación [de las calles franquistas] a través de las Juntas de Distrito», defendiendo esa iniciativa ya realizada como «participación real». Según De España, eran los vecinos quienes «deben hacer las propuestas, trabajando conjuntamente con el Ayuntamiento». Las propuestas están desde el pasado marzo en la Concejalía de Memoria Histórica

Tras esas palabras de la edil De España, la oposición de unió durante la mañana de ayer para criticar de manera unánime la postura del PP, acusando al gobierno de Barcala de querer ralentizar el proceso de democratización del callejero alicantino. «Es intolerable que una persona que cobra dinero público mienta de esa forma sin ningún pudor. Las propuestas de nuevas denominaciones ya se acordaron con las Juntas de Distrito, se reunieron todas durante el mes de marzo, algo que el PP debería saber porque forma parte de las mismas», señaló el socialista Fernando Marcos. Desde Guanyar, Miguel Ángel Pavón censuró que «el PP quiera volver a llevar a las Juntas de Distrito un punto que ya se ha tratado». Según el concejal, «está claro que para el PP no es urgente ni prioritario cambiar los nombres de la calles franquistas, con los que parece que están muy cómodos; parece que el PP insiste en demorar un cambio de nombre de calles que ya consiguió demorar acudiendo a los tribunales». En la misma línea, el tercer exsocio del tripartito, Compromís lamentó «que el estrés del minigobierno le está causando una amnesia temporal a la señora De España, porque parece que no se ha enterado que en todo este proceso ha habido participación», según la edil María José Espuch. Por su parte, la portavoz de Cs, Yaneth Giraldo, añadió que «en este tema los del PP están mareando la perdiz, como antes lo hicieron los del tripartito con una propuesta muy sectaria y poco participativa».

Tras el rosario de críticas desde la oposición municipal, el gobierno liderado por Barcala anunció, pasadas las cuatro de la tarde de ayer, la convocatoria de la Comisión de la Memoria Histórica, en un comunicado en el que se añadía que la cita prevista para el próximo martes era para «tratar las propuestas de las Juntas de Distritos realizadas del cambio de los nombres de las calles». Fuentes de Alcaldía confirmaron que las propuestas que se debatirán la próxima semana serán las que salieron de las reuniones vecinales celebradas el pasado mes de marzo, descartando convocar nuevas Juntas de Distrito como había anunciado unas horas antes la portavoz del equipo de gobierno, Mari Carmen de España (PP).

En el comunicado de la tarde, en el que el PP daba marcha atrás convocando la Comisión de Memoria Histórica, el gobierno municipal presumió de ser el partido que democratizará el callejero alicantino. «Va a ser el PP el que finalmente consiga cambiar las calles y logre hacer cumplir la Ley de la Memoria Histórica en esta ciudad. La izquierda ha sido incapaz de conseguir cerrar el expediente con el que llevamos ya años y llegar a un acuerdo de consenso para aprobar el cambio definitivo», señaló la edil de Cultura, María Dolores Padilla. Durante la mañana, los grupos de la oposición, a petición de Compromís, firmaron un documento conjunto para intentar forzar al alcalde, Luis Barcala, a convocar la comisión plenaria.