El Museo de Belenes de Alicante, que lleva meses atravesando problemas de personal que se habían agravado en las últimas semanas, obligando al recinto a cerrar sus puertas a los turistas, empiezan a resolverse con la presencia de un conserje. El museo, de hecho, reabrió ayer, según ha confirmado la concejal de Cultura, María Dolores Padilla, después de que se haya incorporado una ayudante interina. Con este refuerzo, el museo prestará sus servicios de martes a viernes, de 10 a 13,45 y de 17,15 a 19,45 horas. Estará cerrado los sábados, domingos y lunes.

"Hemos conseguido desbloquear las dificultades que impedían el normal funcionamiento durante los últimos meses del Museo de Belenes, un enclave cultural que recibe miles de visitantes durante todas las cuatro estaciones del año", más de 30.000 personas. Este recinto lleva tiempo con este mismo problema, de hecho en 2017 estuvo varios meses cerrado pese a formar parte de la ruta de los cruceristas por la falta de conserje. En verano se dotó de este trabajador al menos por un año pero el problema se reprodujo.

"Prácticamente desde principios de año, el Museo de Belenes, situado en el casco histórico, calle San Agustín, 3, ha atravesado problemas de personal para atender la recepción de visitas. Ante esa anómala situación, hemos contratado una ayudante interina, con lo que hemos superado dicha incidencia", ha manifestado María Dolores Padilla.

El Museo de Belenes es uno de los enclaves turísticos de interés más importantes del casco histórico y recibe decenas de miles de visitas al año. Está dentro del circuito de excursiones que recorren el centro de la ciudad y su cercanía al Ayuntamiento le lleva a recibir, también, a los numerosos turistas que recorren el palacio consistorial.

El Museo de Belenes contiene en sus vitrinas miles de piezas y dioramas. Parte de sus fondos proceden de donaciones internacionales. El centro ofrece al visitante una variada perspectiva de figuras y escenas inspiradas en el Antiguo y Nuevo Testamento, cuadros en relieve, belenes en arquetas, abiertos, belenes panorámicos, etc, según informa el Ayuntamiento de Alicante.

Los interesados en recorrer sus instalaciones van a encontrar también paneles informativos sobre la historia del belenismo. En uno de esos carteles se puede leer "aunque en las catacumbas ya se descubrieron pinturas con escenas de la Navidad, la primera representación corpórea del nacimiento de Jesús la realizó San Francisco en Greccio, en la Nochebuena de 1223, con personajes y animales vivos". Aunque los belenes como se conocen ahora, con figuras (y no con personas) datan de 1252, año en que se montó uno en el monasterio de Füssen, en Alemania.

En España, en el siglo XVIII, con la llegada del rey Carlos III desde Nápoles, la costumbre de instalar belenes se impuso fuera del ámbito eclesiástico y se popularizó en el palacio real, en las mansiones y en muchos hogares

Con la reapertura de este equipamiento, la Concejalía de Cultura consigue restablecer la oferta formativa y de entretenimiento ligada a este centro significativo de la tradición belenística.