Otro adiós en el Ayuntamiento de Alicante. Y otro adiós en el PSOE. La concejala Sofía Morales anunció ayer que dejará su acta. En torno al 20 de junio, presentará su renuncia como edil y, previsiblemente, en el pleno de final de mes se dará cuenta del que es el undécimo cambio que experimenta la corporación en la que ha sido una de sus legislaturas más accidentadas.

Morales, que fue edil de Hacienda mientras los socialistas se mantuvieron en el poder, comunicó ayer su renuncia de forma un tanto peculiar: enviando un mensaje masivo a sus contactos de WhatsApp. Será sustituida por Rosana Arques, de Izquierda Socialista, que, por cierto, fue su asesora durante su etapa al frente de las cuentas municipales. Arques está en la ejecutiva del PSPV que lidera Ximo Puig.

En los últimos tiempos Morales se encontraba en el seno del socialismo alicantino en una posición delicada: ni obtuvo dedicación exclusiva con el PSOE ya en la oposición, ni pertenecía a la nueva ejecutiva local del partido, que sucedió a la que dirigía Gabriel Echávarri. A pesar de eso, en su despedida la concejala no mostró acritud contra su partido: «Sigo perteneciendo al PSPV-PSOE de Alicante. Y sigo al servicio de mi partido para, como y cuando me necesite. Sigo siendo demócrata y socialista por encima de todo».

Pero su mensaje sí conservó alguna reflexión crítica: tras agradecer a las personas que «se han portado con respeto, corrección, cariño, que han sido casi todos y todas», también subrayó su «agradecimiento a los que no lo han hecho porque de ellos he aprendido más aún, aunque no hubiera querido tener que aprenderlo».

Durante un mandato en el que las batallas políticas internas en el Ayuntamiento han sido constantes, Morales aseveró que «no caben a mi juicio luchas que no sean por utilizar lo mejor del sistema administrativo y de partidos para mejorar la vida de la ciudadanía».

Los cambios en la corporación desde las elecciones de 2015 han sido constantes. Con el de Morales ya van once. Echávarri dejó el Consistorio en abril por sus dos procesamientos y acabó abriendo la puerta al popular Luis Barcala. Más reciente fue la marcha de Víctor Domínguez de Guanyar. Y antes Nerea Belmonte se convirtió en tránsfuga tras ser expulsada también de esa última coalición.