Aumentar las plantillas de trabajadores. Esta es la medida que proponen los sindicatos para reducir las diferencias de tiempo que hay entre los hospitales de la provincia a la hora de realizar una prueba diagnóstica. Diferencias que llevan, por ejemplo en el caso de las ecocardiografías a que en el General de Alicante se hagan en tres días como máximo y en el General de Elche en 13 meses.

«Esto ocurre porque las plantillas están ajustadas y hay cero inversión en sustituciones o se jubilan trabajadores y no hay remplazo, por lo que estas situaciones se agravan tras periodos de vacaciones, como ocurre en septiembre», explica el responsable del Sindicato Médico en Alicante, Víctor Pedrera.

Para Francisco Tévar, responsable de CC OO en el departamento del Hospital General de Alicante, en estas diferencias también tienen mucho que ver la organización de los equipos de trabajo. «Hay servicios que con los mismos trabajadores sacan mucho mejor el trabajo que las unidades de otros hospitales y que tienen el mismo número de trabajadores». Tévar recuerda además que en los últimos años de la crisis «se han perdido muchos empleos en sanidad que después no se han ido recuperando».

Jesús García, secretario del sector de Salud de UGT, pide además que se saque el máximo rendimiento a la tecnología de los hospitales. «A un paciente no le vas a hacer una resonancia a las 3 de la mañana, pero sí le puedes citar a las cinco de la tarde». García también pide un refuerzo de las plantillas en los hospitales de la Comunidad como fórmula para reducir estas desigualdades, «pero este refuerzo tiene que ser en todas las categorías, porque tan importante es un celador como un médico para el buen funcionamiento de los servicios».

Por último, la presidenta de la asociación Defensor del Paciente, Carmen Flores, tacha de «discriminación para el paciente» esta diferencia en los tiempos para realizar una prueba diagnóstica. Para Flores «no es posible que unos pacientes tengan más derechos que otros en función de la zona en la que residan». En este sentido, a juicio de la presidenta de esta asociación, «es la Conselleria de Sanidad la que debe tomar cartas en el asunto y exigir a los gerentes de los hospitales que pongan todos los medios para atajar esta situación».