La provincia de Alicante registró el año pasado 2.313 accidentes de tráfico en el ámbito laboral. La inmensa mayoría de estos accidentes, 1.690, se produjeron en desplazamientos yendo o volviendo del trabajo. El resto fueron durante la jornada laboral. Los datos fueron dados a conocer ayer en el marco de la presentación de la campaña que Ibermutuamur está realizando esta semana para concienciar sobre una situación que consideran problemática. De hecho, este tipo de accidentes se ha incrementado un 10% en el último año en la provincia, según los datos del Instituto Valenciano de Seguridad y Salud en el Trabajo (Invassat).
La mayor parte de estos accidentes, casi la mitad, se da en empresas pequeñas, de menos de 50 trabajadores, mientras que aquellas que cuentan con más de 500 trabajadores acaparan el 18,5% de estos siniestros. Los trabajadores menores de 35 años son los que sufren en mayor medida estos accidentes. Se dan más accidentes de este tipo entre trabajadores con contratos indefinidos y según datos ofrecidos ayer por Ibermutuamur, construcción y servicios son los sectores que concentran mayor número de siniestros. Para el director de la mutua en Alicante, Rafael Patrocinio, «las cifras no vienen acompañando en los últimos años» y llama la atención sobre el hecho de que durante el periodo 2014-2017 el 40% de los accidentes laborales en los que hubo fallecidos en la provincia se produjeron en la carretera. Los expertos también alertaron del alto número de accidentes que sufren los repartidores de comida a domicilio que trabajan con motocicletas. «La mayoría de los accidentados tiene menos de 26 años y una de las causas principales de estos accidentes es que las motos se ubican en zonas invisibles para los coches», explicó ayer Javier Coderch, coordinador de Prevención de Ibermutuamur.
Rafael Patrocinio llama a las empresas a poner el foco de atención sobre los accidentes de laborales de tráfico con la puesta en marcha, por ejemplo, de planes de movilidad que fomenten el transporte público entre los empleados y racionalicen los desplazamientos.
En esta línea Ibermutuamur organiza esta semana en su sede de Alicante una campaña de sensibilización en la que participarán trabajadores, empresarios, personal de la administración y representantes de los sindicatos. La campaña se articula en distintas dinámicas e incluye el uso de un simulador para que los trabajadores se puedan entrenar en la conducción bajo distintas condiciones climáticas, por ejemplo lluvia o niebla, o mostrar su destreza ante situaciones extremas de riesgo, como el acuaplaning o la aparición repentina de un peatón en la calzada. Mediante un simulador de alcoholemia se puede experimentar cómo se conduce con una tasa elevada de alcohol en sangre. Por último se ofrecen consejos sobre cómo actuar ante un accidente de tráfico y cómo auxiliar a los heridos.
En la inauguración de estas jornadas ayer, los expertos ofrecieron a los asistentes algunos consejos prácticos a la hora de subir al volante. Muchos de estos consejos sorprendieron a los asistentes, que desconocían, por ejemplo del peligro que supone circular con la ventanilla medio bajada, ya que en caso de un impacto lateral, ésta actúa como una cuchilla en mitad de la cara. Llevar el asiento demasiado elevado también puede ser peligroso porque la cabeza puede impactar contra el marco superior de la ventanilla.
