«La escolarización de niños y niñas de dos años favorece unos buenos resultados académicos en un futuro, y también es una medida por la conciliación familiar. Está más que comprobado»· El mensaje de los responsables de la Conselleria de Educación viene acompañado para el curso que viene de hasta 4.000 plazas gratuitas en la provincia.
Se trata de puestos escolares para niños de dos años en las escuelas infantiles municipales y los centros infantiles autorizados de la Generalitat, sumados a las 870 plazas ofertadas en los 44 colegios públicos que tienen aulas específicas para estos niños dentro del programa experimental de extensión de la escolarización desde los cero años, una de las apuestas más firmes del Consell.
Educación confirmó ayer su compromiso con la publicación de la convocatoria de las nuevas ayudas económicas en el DOGV . En concurrencia común se concederá la plaza directamente a alumnos de familiares con renta inclusiva y que estén inmersos en situaciones de violencia de género, entre otros extremos.
El conseller, Vicent Marzà, confía en que la matrícula, cuyo plazo de admisión concluye el próximo jueves día 24 de mayo, «aumente considerablemente el curso que viene con la oferta de plazas gratuitas para niños de dos años. Es importante fomentar la escolarización en este tramo educativo para incidir en el desarrollo de los niños», abunda.
En el conjunto de la Comunidad esta medida triplica las plazas gratuitas para niños de dos años, extremo que no ha sido nada de bien recibido en el sector de la enseñanza infantil privada.
«Estocada»
«Es una estocada de muerte para el centenar de centros de Infantil de 0 a 3 años, porque más de la mitad de su matrícula, aproximadamente el 60% del total, está sustentada por los niños de esta edad», afirma un portavoz del sector.
Hacen suyas las palabras del conseller en el sentido de que a esa edad es importante escolarizar a los niños «pero será a todos en todos los centros existentes, ¿porqué nos discriminan?», se preguntan.
Las escuelas infantiles privadas se han ofrecido repetidamente a la Generalitat para elaborar un mapa escolar sobre la demanda y plazas existentes, con el propósito de que Educación aproveche los centros ya existentes a la hora de generalizar la escolarización de los niños más pequeños.
«En lugar de aceptar la colaboración ofrecida en la conselleria atentan contra la columna vertebral de las escuelas infantiles privadas, las matrículas de dos años, porque entre pagar una parte de la matrícula con el bono infantil y no pagara nada, la diferencia es sustancial» puntualizan.
En el sector afirman que la política educativa del Consell con las aulas de Infantil les va a abocar al cierre.
