Primero en un pleno y ahora en sede judicial. La edil tránsfuga del Ayuntamiento de Alicante Nerea Belmonte ha sido citada por la Fiscalía Anticorrupción por el supuesto intento de compra de voto que reveló en el transcurso del primer pleno del actual alcalde, Luis Barcala.

La citación se produce después de que dos vecinos de Alicante, José Luis Valdés y Francisco García, denunciaran en la Fiscalía las palabras de la expodemita, quien aseguró que le habían ofrecido un sueldo de 3.500 euros y un puesto de salida en las listas a cambio de apoyar a la candidata socialista a la Alcaldía, Eva Montesinos.

Las palabras de la concejala no adscrita fueron respuesta a las manifestaciones del portavoz de Guanyar, Miguel Ángel Pavón, formación por la que se presentó a las elecciones, a quien precisó que ese supuesto intento de compra de voto no había salido del PP, pero sin aportar prueba alguna que avalara lo que afirmó. En el momento que lo dijo, todas las miradas se volvieron hacia la bancada que ocupan las formaciones de izquierdas, y en concreto hacia el PSOE, que inmediatamente se desvinculó de un ofrecimiento que la propia Montesinos tachó de «tácticas mafiosas».

En los próximos días la edil tendrá que explicar ante el fiscal si realmente le hicieron ese ofrecimiento, lo que está considerado un delito aun rechazándolo, así como quién se lo hizo. En función de los datos que aporte, el fiscal decidirá entre archivar las actuaciones o, por contra, enviarlas al juzgado si ve indios de criminalidad.

Uno de los denunciantes, Valdés, fue el artífice del descabello político del anterior regidor, Gabriel Echávarri, al que denunció por despedir a la cuñada del entonces portavoz popular y hoy alcalde.