El Puerto de Alicante recuperará en 2019 las escalas de la compañía Pullmantur, la única y gran naviera en apostar por la ciudad como puerto base para sus cruceros por el Mediterráneo en 2017, con 16 operaciones entre abril y noviembre que trajeron 20.000 turistas, generando un impacto económico en torno a 1,8 millones de euros. El regreso de Pullmantur, que borró a Alicante de la programación de la naviera para este año, como también hizo Costa Cruceros, fue anunciado ayer por la edil de Turismo, María Carmen de España (PP), quien de paso dio a conocer la llegada el año próximo a la estación marítima de MSC, Aida Cruises y Thomson.
De España adelantó la noticia durante la presentación de las actividades que el Ayuntamiento ha preparado para recibir, mañana, a más de 6.000 turistas que desembarcarán en tres cruceros. A los ya anunciados bailes regionales en la plaza del Ayuntamiento con exposición de nanos i gegants entre las 10.30 y las 12.30 horas, se unen las danzas de las alumnas del Conservatorio José Espadero para dar la bienvenida a los visitantes en la propia terminal, y la plantà de varios ninots de la hoguera que se llevó a Lyon en la avenida de la Constitución para que conozcan algo de las fiestas oficiales ahora que se aproximan. En esta jornada dirigida a los cruceristas colabora también la Concejalía de Comercio. Más de 400 establecimientos harán descuentos a estos turistas. La Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería destaca que 31 establecimientos del centro ofrecerán tapas y copas.
Para este año se espera la llegada de 100.000 cruceristas, según la previsión de la terminal. La directora comercial de la Autoridad Portuaria, Mónica Bautista, marcó el reto de alcanzar los 200.000, «algo difícil pero no imposible».
La edil de Turismo dio algunos datos de la importancia del turismo de cruceros para Alicante, apoyándose en varios informes de los responsables de la empresa que gestiona la estación marítima, según los cuales «cada día de crucero en el Puerto crea 700 puestos de trabajo directos e indirectos en la ciudad». Esos estudios inciden en que el impacto económico de la llegada de los buques se estima en 300.000 euros diarios de media.
Réplica
La anterior responsable del área, Eva Montesinos, se refirió a la vuelta de Pullmantur: «No nos importa que consideren nuestro trabajo como propio, siempre que repercuta en el interés general, aunque provoca rubor escuchar a la misma persona que denunció que Pullmantur abandonaba Alicante reconocer que seguirá en la ciudad. Como dijimos desde el Patronato de Turismo cuando lo dirigía el PSOE, Pullmantur realiza rotaciones en las ciudades que utiliza como puerto base».
Antes del regreso el próximo año de las escalas de Pullmantur, la naviera tiene prevista una salida el próximo otoño, que conectará Alicante con la ciudad brasileña de Recife. Habrá escalas previas en Tenerife, y Cabo Verde, que realizará el buque Sovereign.
