«Solicitamos que se sustituyan las labores de asfaltado en calles sin habitantes que no van a beneficiar literalmente a nadie por otras donde viven más personas y que el Ayuntamiento priorice el registro en el padrón a la hora de mejorar los servicios en nuestra partida». Es la reclamación de la asociación de vecinos Nuevo Moralet, que está en desacuerdo con los criterios de selección que ha aplicado el gobierno municipal a la hora de elegir qué calles serán las que se reparen entre todas las que se vieron afectadas por la gota fría de marzo de 2017. El Ayuntamiento ha elegido como zonas de actuación en El Moralet 15 calles de la partida y otras seis en el Pla de Xirau, un núcleo que en total tiene, según la entidad denunciante, 13 vecinos, y que es donde están las calles de la discordia.

La Junta de Gobierno aprobó la semana pasada una inversión de dos millones de euros para el mantenimiento de 46 caminos en partidas rurales en Alicante, algunos de ellos gravemente afectados por las lluvias de hace un año, repartidos por la Alcoraya, La Cañada, Villafranqueza, Pla de la Vallonga, Moralet-Valle Grande Oeste, Moralet-Camino Ventorrillo, Moralet-Plá de Xirau, El Moralet, El Rebolledo y Fontcalent.

La presidenta de la asociación de vecinos, María Medel, señala que en varias calles seleccionadas del Moralet-Pla de Xirau «constan una persona o ninguna empadronadas según el listado que nos facilitó hace dos años el departamento municipal de Estadística. Estamos a la espera de recibir un listado actualizado y ampliado».

Las calles de la discordia que han sido elegidas por el Ayuntamiento para su reparación son Tórtola y Halcón, donde constan cero vecinos empadronados; Colibrí, donde hay uno; y avenida de las Aves y Camino Murta, «de las que desconocemos el empadronamiento pero pertenecen al núcleo de Pla de Xirau que es el menos habitado de El Moralet, con 13 vecinos en sus 13 calles (11 de ellos figuran inscritos en la calle Mirlo)». Ésta última figura asimismo en el listado de zonas de actuación y es la única calle a la que la entidad vecinal no pone pegas al tener empadronados.

«No entendemos por qué se han seleccionado esas calles donde no vive nadie en lugar de otras que son domicilio habitual de más personas y en núcleos más poblados e igualmente perjudicados por el temporal, que afectó muy gravemente a nuestra partida». En este sentido, proponen que se actúe, y así lo han pedido al Ayuntamiento a través de un escrito presentado por registro, en la Avenida de los Ríos, donde según el padrón hay 40 habitantes; Lepiota, con 21; Lisa, donde viven 20 personas; Río Volga, con 19; avenida del Ciervo, con 9; Llama, con 8; Danubio, con 7; Bambi, con 6; y Río Garona, con 4 vecinos. Algunas de ellas por ser también zona de paso.

«Cuantas más asfalten mejor, pero si tiene que haber una prioridad, que el criterio sea donde vive más gente. No tiene sentido que mejoren donde viven 13 personas y dejen fuera la zona donde hay casi 140 vecinos». Desde la Concejalía de Estadística del Ayuntamiento precisaron que en la avenida de las Aves sí hay vecinos, cinco en concreto, mientras que aseguraron que el Camino de Murta no pertenece al término municipal de Alicante.

Ortiz

Por otra parte, la Junta de Gobierno aprobó ayer la adjudicación del proyecto de adecuación de caminos en partidas rurales, contrato que se queda en manos de la mercantil Tizor Hormigones y Asfalto, del empresario Enrique Ortiz. El proyecto salió a licitación por 200.000 euros pero se ha adjudicado finalmente a la baja por unos 135.000 euros.