Después de 75 años dando pasos, las fiestas de Moros y Cristianos de San Blas dejan su huella en la calle Pintor Gisbert, la más comercial y populosa del barrio, gracias a las placas metálicas con la cruz y la media luna que adornan los distintos tramos de acera. Se trata de un guiño a estas fiestas que tuvieron su primera manifestación en 1943 y que se han consolidado hasta el punto de que más de 3.000 personas participan cada año en el mes de julio en los desfiles entre festeros, músicos, figurantes y boatos.

La cruz y la media luna salpican los adoquines de las aceras de Pintor Gisbert que se han puesto nuevas en el marco de las obras de mejora de evacuación de pluviales que está ejecutando desde hace meses Aguas de Alicante. Ya están puestas en el tramo entre General Mancha y Virgen de Lourdes, donde también quedan a la vista, pero en la calzada, unos diez metros de las vías por las que circulaba el tranvía de la ciudad de Alicante hasta los años 70.

Los raíles afloraron el pasado verano, en pleno proceso de las obras del saneamiento y mejora de la captación y evacuación de aguas pluviales, momento que el Ayuntamiento aprovechó para llevar a cabo la reposición del pavimento de la calle.

Tras aparecer las vías de la antigua línea 5 que unía San Blas con el Mercado Central y que pasaba por Benito Pérez Galdós y la calle Calderón, el Ayuntamiento decidió recuperar los raíles, junto a los adoquines, y trasladarlos a una finca municipal. Tras reuniones entre la Concejalía de Urbanismo y de Cultura cuando estaban en manos de Guanyar, se optó también por recuperar una muestra del material del antiguo tranvía y enviarlo al centro de Las Cigarreras, donde se procederá a su catalogación.

La Junta Central de Comparsas de San Blas aprovechó la obra para proponer a la Concejalía de Urbanismo la instalación de los adoquines de en homenaje a los Moros y Cristianos, y el Ayuntamiento y Aguas de Alicante aceptaron la propuesta. «De momento han puesto las del primer tramo, y después colocarán desde San Juan Bautista hasta la calle Pilar, y en el tramo que sigue hasta Virgen de las Nieves», explica José Manuel Espinosa, delegado de Cultura y embajador moro de San Blas desde hace ya 40 años. «Cada 15 ó 20 pasos hay placas, de acero inoxidable, con la cruz y la media luna. Va a estar así toda la calle Pintor Gisbert, a la vista de la gente cuando pase, como un homenaje a los Moros y Cristianos». Asimismo, los festeros, que también son vecinos en muchos casos, han quedado muy contentos con la ampliación de las aceras de Pintor Gisbert, ahora mucho más anchas. «Es un reconocimiento, un honor y un orgullo, y queremos dar las gracias al Ayuntamiento y a Aguas por haber hecho este guiño a los festeros y los vecinos», dijo el presidente de la Junta, Ximo Calpena. La Junta prepara actos especiales con motivo del 75 aniversario, que se celebrarán en la plaza de San Blas desde el 30 de junio, en que tendrá lugar la presentación de cargos. Las Entradas Mora y Cristiana serán los días 21 y 22 de julio, el tercer fin de semana del mes, para evitar que la coincidencia con el Mundial de fútbol reste participación a los desfiles.