«El nerviosismo ante la posibilidad de que la izquierda siga gobernando esta ciudad se ha apoderado del PP», ha asegurado la alcaldesa en funciones, Eva Montesinos, después de la difusión de imágenes en las que aparece en actos de campaña de 2015 junto a José Ramón Tiller, que formó parte de la empresa Crespo Gomar investigada ahora por la presunta financiación ilegal de las campañas electorales socialistas de 2007 y 2011 en la Comunidad.

«Que el partido más corrupto de la historia de la Comunidad Valenciana venga a decir tonterías sobre una campaña electoral del PSOE que ni siquiera está bajo investigación me parece indigno», ha añadido tras dos días de silencio desde que los populares la vincularan con Tiller junto al alcalde Gabriel Echávarri, al presidente de la Generalitat, Ximo Puig, y al secretario general del PSOE, Pedro Sánchez.

«Quiero recordar al PP que de existir alguna campaña bajo investigación, porque la Justicia todavía no ha comunicado nada, sería la de 2007 y en ningún caso la de 2015. Nadie está investigando una campaña que se hizo con poquísimos medios y muchísimo esfuerzo de todos», argumenta Montesinos a una semana de la anunciada dimisión de Echávarri como alcalde y tras la que como número dos espera hacerse con la vara de mando municipal.

Montesinos ha asegurado que «yo no hice absolutamente nada ilegal en la campaña de 2015».

Por otra parte, el secretario general de los socialistas, Miguel Millana, ha afirmado que «Eva Montesinos es la sucesión previsible y prevista» y ha dicho «no encontrar ninguna razón de peso» para que no sea así, a no ser que «saliera algo nuevo con datos y pruebas concretas».

A su juicio, la investidura «no debería complicarse porque tenemos clara conciencia de que la corporación municipal y sus componentes son personas honestas».