Torrevieja

La desalinizadora de Torrevieja será capaz de producir 80 hectómetros cúbicos anuales desde «junio-julio», según anunció ayer la ministra de Agricultura y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina en una visita a la planta torrevejense. García Tejerina aseguró que el departamento que dirige ya trabaja además en un proyecto básico para la ampliación futura de la planta con el objetivo de alcanzar los 120 hectómetros cúbicos anuales de producción, tras una inversión de 45 millones de euros. La inversión está en fase de redacción de proyecto básico, dijo, y los plazos «serán lo más cortos posibles». No fijó fechas.

La ministra agradeció al presidente de Red Eléctrica, José Folgado, que ayer también acudió a la visita de las instalaciones, el «esfuerzo» en inversión y tiempo que se está realizando en estos momentos «con tres turnos de trabajo al día» para que el tendido de alta tensión aéreo y subterráneo que debe dotar a la planta para doblar su capacidad energética y de producción esté listo en junio.

La responsable de Medio Ambiente indicó que en la actual situación de sequía el Gobierno está volcado en garantizar, en primer lugar, el abastecimiento urbano para buena parte de la provincia de Alicante de agua potable, algo que se logrará con la obra a finalizar dentro de tres meses y con la posterior ampliación. La planta desalinizadora, operada por Acciona, y que sigue siendo la más grande de Europa, tiene todos sus sistemas duplicados para evitar dejar de operar en caso de avería, pero también para el día en el que se duplique la producción.

A esta actuación le van a seguir otras inversiones. Por ejemplo, la construcción de un nuevo depósito de agua procedente de la planta para consumo urbano, que proyecta en estos momentos la Mancomunidad de Canales del Taibilla en Vistabella, en Algorfa.

Desembarco

La ministra estuvo acompañada en su recorrido por numerosos cargos del PP -entre ellos, el delegado del Gobierno, Juan Carlos Moragues, la portavoz del PP en las Cortes, Isabel Bonig, o la secretaria regional del PPCV, Eva Ortiz. También acudió una amplia representación de representantes del PSOE, como su portavoz en las Cortes, Manolo Mata, o los alcaldes de Rafal, Manuel Pineda, José Manuel Butrón (Los Montesinos) y Guardamar, José Luis Sáez. Es la primera vez que un miembro del gobierno de Rajoy -muy crítico con la política de construcción de desalinizadoras en el mandato de Zapatero- visitaba esta planta que costó más de 180 millones de euros. En un significativo cambio de postura política las desalinizadoras -con un coste de producción muy elevado- son ahora la tabla de salvación para municipios que habrían tenido que recurrir a las restricciones. Terminada en 2014, que solo comenzó a producir a su máxima capacidad disponible (40 hectómetros cúbicos) a finales de 2016, tras reclamar el agua los agricultores del trasvase, con precio subvencionado con dinero público. Sin embargo, en septiembre de 2017 la Mancomunidad de Canales del Taibilla reclamó los caudales como prioritarios para abastecimiento urbano, ante el cierre del Trasvase y la sequía extrema en la Cuenca, lo que supone ahora el 60% del agua que llega al grifo de 33 municipios de la provincia, entre ellos, Alicante, Elche, Orihuela y Torrevieja.