Tercer estudio sobre una muerte. El instructor de la causa abierta por el asesinato de María del Carmen Martínez ha admitido el informe forense, presentado a instancias de la acusación particular que se ejerce en nombre del hijo de la víctima, en que se concluye que la mujer pudo tardar en fallecer hasta 45 minutos después de recibir los dos disparos en la cabeza. La viuda del expresidente de la CAM Vicente Sala fue tiroteada el 9 de diciembre de 2016 en el lavadero del negocio de automoción que regentaba su yerno Miguel López, único sospechoso de su muerte.

El estudio elaborado por Fernando Verdú, uno de los forenses que participó en las autopsias de las niñas de Alcasser, precisa que la víctima falleció a consecuencia de una hipovolemia provocada por los impactos, una hemorragia que no fue aguda debido a las lesiones que presenta, que no afectaron a ningún órgano vital.

Esta hipótesis echa por tierra la defendida por los peritos contratados por el abogado de Miguel López, quienes sostienen que la causa última de la muerte de María del Carmen fue el shock hipovolémico al que se sumó una asfixia por aspiración de su propia sangre. Esto habría provocado que el deceso se produjera apenas diez minutos después del tiroteo, que lo sitúan en torno a las 18.53 horas. Una teoría que que coloca al sospechoso fuera del lugar del crimen pero que Verdú asegura que se apoya en conjeturas y no en datos científicos.

El forense valenciano, quien ha sido citado para ratificar su informe el próximo 24 de abril, afirma que «el conjunto de datos policiales y cadavéricos» con que se cuenta «permite afirmar que con un muy alto grado de probabilidad el momento de producción de las heridas se encuentra sensiblemente más cerca de cuando la víctima fue vista con vida y sin lesiones por última vez (a las 18.25 horas) que del momento que fue encontrada con vida ya lesionada (a las 18.52 horas). Miguel López fue captado por una cámara saliendo de lugar del crimen a las 18.38.

Ambos estudios, el de la defensa y el de la acusación, se han realizado sobre las imágenes tomadas durante la autopsia practicada la víctima en el Instituto de Medicina Legal de Alicante, que no hace alusión a la asfixia.