Más de 1.500 personas, entre alumnos, profesores y personal de administración y servicios, han clausurado en el pabellón deportivo el colegio Agustinos de Alicante una semana de trabajos escolares que han puesto el foco en la erradicación de la violencia escolar.

"Ya no se trata de hacer un solo acto con toda la comunidad educativa, sino de trabajar durante una semana un valor relacionado con la paz", explican desde el centro.

Entre los valores que se han trabajado en las aulas, por cursos, ámbitos y asignaturas, han hecho hincapié en la emoción de la calma.

"La calma es la tranquilidad de ánimo, la fortaleza emocional del sujeto que no se deja afectar de un modo negativo por las circunstancias externas", añaden los docentes.

Entre los mensajes difundidos con prácticas de todo tipo y a todos los alumnos, en función de su edad, subrayan que " hay que tener la capacidad de mantener la tranquilidad en momentos de dificultad, mantener la serenidad para poder pensar con tranquilidad".

Añaden que "cuando en un ambiente crispado hay una persona que puede mantener la calma, el ambiente baja, se hace más sosegado y los temas se pueden hablar".

Y por contra, "el enfado, los nervios, el estrés, los conflictos en clase, en la familia, con otras culturas, ideologías y razas, hacen que no vivamos en paz, que no nos tratemos como iguales y que tengamos consecuencias negativas para todos con situaciones de acoso, maltrato, y violencia de género".

Los profesores animan a los estudiantes a "arriesgarse a luchar contra todo lo que nos hace tratar a las personas de manera diferente o distinta y en esta II Semana de la no-violencia escolar y la paz lo vamos a demostrar".

Tras participar con sus actividades toda la semana, como colofón formaron entre todos un multitudinario mosaico por la paz.