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El primer fracaso de Gabriel Echávarri en solitario

El gobierno socialista, de 6 ediles, evidencia en el inicio de la tramitación de los presupuestos su situación de franca minoría frente a una oposición que consigue retrasar las votaciones en 3 de 4 organismos autónomos

El primer fracaso de Gabriel Echávarri en solitario

Las prisas del gobierno local por intentar llevar cuanto antes el presupuesto de 2018 ante el pleno evidenciaron ayer la soledad del grupo municipal socialista, encabezado por el alcalde de Alicante, Gabriel Echávarri, tras la ruptura del tripartito el pasado mes de noviembre. Y es que toda la oposición se unió para retrasar las votaciones en los organismos autónomos. Lo consiguieron en tres de los cuatro, ya que sólo el Patronato de Turismo, dirigido por Eva Montesinos y que fue el último en convocarse en la mañana de ayer, logró superar el trámite de la urgencia y, posteriormente, aprobar las cuentas propias para este año. El resto de borradores se quedaron sobre la mesa a la espera de convocar nuevas reuniones.

La jornada aciaga para los socialistas arrancó a primera hora, en el Patronato de la Vivienda, donde el PP exigió, bajo amenaza de impugnación, que no se celebrase la Junta por convocarse con menos de 24 horas de antelación, lo que suponía un incumplimiento de los estatutos. Finalmente, la sesión se suspendió y la edil Sofía Morales la volvió a convocar para la mañana de hoy, a las 11 horas, y también por la vía de urgencia, por lo que no se descarta que la oposición bloquee la votación como ya hizo ayer en otro organismo autónomo. Visto el escenario vivido este jueves, pocos se explicaban en el Ayuntamiento las prisas de Morales para convocar de un día para otro el Patronato de la Vivienda y no esperar al procedimiento ordinario, que supone celebrar la reunión a dos días vista.

El segundo rejonazo de ayer para el PSOE tuvo lugar poco después, en el Patronato de Escuelas Infantiles, cuya sesión se llegó a celebrar pero en la que no prosperó el trámite de urgencia por el que se iban a votar los presupuestos del organismo autónomo. Los cuatro grupos de la oposición (PP, Guanyar, Ciudadanos y Compromís) sumaron fuerzas y lograron que ayer no se pudieran someter a votación las cuentas para el ejercicio 2018. Está previsto que se celebre otras sesión el lunes o martes de la próxima semana, que se convocará por la vía ordinaria.

Con todo, la situación más criticada se vivió en la Agencia Local de Desarrollo, cuya reunión estaba prevista para una hora después de la sesión de las Escuelas Infantiles, donde la oposición obligó a dejar los presupuestos, por el momento, sobre la mesa. A esa cita ni se presentó el concejal responsable del área, el socialista Carlos Giménez, que desconvocó por teléfono la sesión, provocando el enfado de la oposición y, sobre todo, dejando a sus compañeros de grupo sin defensa posible ante el desaire en forma de ausencia. En la antigua sala de la Junta de Gobierno tuvo que dar la cara la también socialista Eva Montesinos, que al final fue la única que logró aprobar los presupuestos de su organismo autónomo. Y es que el Patronato de Turismo, el último en celebrarse ayer, dio el visto bueno a la urgencia y también al borrador de cuentas para este año, ya que la parte social (expertos y profesionales del turismo) se posicionó con el gobierno y dejó en minoría a la oposición, ya que la composición de ambos bandos es diferente en cada organismo.

¿Votación clave?

La hoja de ruta marcada por Echávarri pasaba por aprobar inicialmente hoy los presupuestos en la Junta de Gobierno, presentarlos la próxima semana ante el Consejo Social y las Juntas de Distrito (vecinos) y someterlos a finales de este mes al pleno municipal, donde la posición de Guanyar parece a priori determinante para la resolución de la votación, ya que PP y Ciudadanos han anunciado ya su oposición a las cuentas de 2018, mientras que Compromís asegura que votará con el PSOE.

El paso del borrador por la Junta de Gobierno, tras el fracaso en la convocatoria de los organismos autónomos de ayer, tendrá que esperar. Sin embargo, la incidencia de las votaciones de los patronatos provocó versiones encontradas en el grupo que lidera el gobierno municipal, ya que mientras la edil de Hacienda, Sofía Morales, defiende que las cuentas de todos los organismos se tienen que aprobar para que la Junta de Gobierno pueda dar el visto bueno al presupuesto consolidado (donde se incluye el global del Ayuntamiento), fuentes socialistas y también de la oposición aseguraron que no es obligatorio el «ok» de todos los patronatos para que el borrador pueda proseguir su camino hacia el pleno municipal, que Echávarri espera convocar a principios de febrero.

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