La alegría inundaba sus ojos. Los Reyes Magos han vuelto a ser los grandes productores de magia infantil. En 24 horas, han recorrido calles, plazas y casas, tratando de no dejar a ningún niño sin juguete. Y claro, ayer, Día de Reyes, fue día de estreno. Entre cabalgatas y reparto de regalos, Sus Majestades no pararon ni momento.

La expresión popular que habla de estar «más feliz que un niño con zapatos nuevos», era ayer la sensación generalizada por todas partes, aunque en lugar de calzado, los niños estrenaron algo que les gusta más: juguetes.

Unos, antes de ir a dormir y otros, a primera hora de la mañana, desde la Noche de Reyes, los menores no dejaron de abrir paquetes. Porque de todos es sabido que Sus Majestades llegan a muchos rincones, y si no pudieron pasarse el viernes cerca de casa, lo hicieron ayer sábado. Melchor, Gaspar y Baltasar participaron en las cabalgatas de Verdegás, Tómbola, San Gabriel y las calles Foguerer y Doctor Buades, donde también se repartieron regalos.

En Verdegás, una batucada abría paso a la comitiva, formada por varios coches clásicos, aunque los Reyes prefirieron llegar montados caballo. En Tómbola, la Comisión de Fiestas Patronales preparó un desfile con conocidos personajes de ficción infantiles, además de carrozas para los cargos festeros y para Sus Majestades de Oriente, que acabaron entregando regalos en la Plaza El Progreso ante un grupo de chavales deseosos de vivir este momento.

Reyes solidarios

Con un cariz solidario, los Reyes también llegaron al Barrio de San Gabriel, al Hospital de Sant Joan y al Hogar Provincial. En el primer caso, la Asociación de Vecinos la Prosperidad de San Gabriel y Comedor Social San Gabriel, con la colaboración de empresas de la zona, realizaron una entrega de juguetes a familias desfavorecidas del barrio.

Y en el segundo caso, los Reyes que recorrieren Sant Joan d'Alacant la tarde del viernes, repartieron ilusión y juguetes a los niños ingresados en Pediatría en el Hospital Universitario de Sant Joan. Libros, balones, juegos y muñecos adecuados para las edades de cada pequeño.

Y por último, en el Hogar Provincial, el Rey Melchor, representado por Toni Cabot (director del diario Información), el Rey Gaspar, personificado por Manuel Ruano (presidente de Aludium) y el Rey Baltasar, encarnado por el torero alicantino, José María Manzanares visitaron a los niños que residen en este centro. Delante del gran belén instalado en el edificio, Sus Majestades no quisieron regresar a Oriente sin recompensar a estos niños por lo bien que se habían portado el último año.

Desde bebés de apenas meses, hasta niños de mediana edad, nadie se quiso perder esta visita real, incluidos numerosos adultos y trabajadores del centro. Los abrazos, las carantoñas y los gestos de ternura se sucedieron. Cada regalo que se abría, cada sorpresa, creaba al instante un nuevo momento de felicidad. Magia real, sin truco alguno.